Dos emprendedores de BCN lanzan un ‘whatsapp’ para enviar dinero
La aplicación, desarrollada en formato chat, permite tanto cobrar como pagar pequeñas deudas, igual que Yaap
Las aplicaciones para cobrar y pagar pequeñas deudas contraídas con amigos o familiares están a la orden del día.
Hace menos de un mes, Telefónica, Caixabank y Banco Santander empezaron a promocionar su app, Yaap Money. Pero no es la única en su segmento. Dos emprendedores de Barcelona han lanzado Cashually, su particular whatsapp para enviar dinero. O lo que ellos definen como friendly payment.
El formato chat hace que su uso recuerde a la aplicación de mensajería instantánea, ahora propiedad de la red social de Mark Zuckerberg, Facebook.
Solicitud a los contactos
Los usuarios podrán hacer pagos a su lista de contactos o reclamar alguna cantidad pendiente enviándoles una solicitud a una persona que ya tenga la app, o a través de un sms en caso de que no se la haya descargado. Eso sí, en este último caso, esa persona deberá bajarse la app en un plazo máximo de seis meses para continuar adelante con la transferencia.
Los dos emprendedores han invertido cerca de 120.000 euros en hacer realidad una idea que nació a principios de 2013. No contaban con la maquinaria de los tres gigantes españoles que han lanzado Yaap. Más bien al contrario.
Financiación propia y del ICF
Han recurrido a fondos propios, a rondas entre amigos y familiares y a una línea de crédito del Institut del Català de Finances (ICF). A nivel judicial, han contado con el asesoramiento de la entidad financiera Prepaid Financial Services.
“Empezamos en julio y ya llevamos unas 4.000 descargas”, precisa Alex García, uno de los fundadores.
Cobros en algunas operaciones
Tanto la descarga como el uso de la app son gratuitos. Sólo en caso de que el usuario decida retirar saldo que tenga en su cuenta de la app para transferirlo a su cuenta bancaria, la empresa cobra 50 céntimos de esa operación, indiferentemente del importe.
“Creemos que es un app muy útil y práctica que resuelve una necesidad cotidiana de la gente”, sostiene García. O dicho de otra forma, un monedero electrónico en su versión más social.