The Crown: qué esperar de la quinta y más turbulenta temporada de la serie sobre los Windsor

Con un nuevo reemplazo de actores, la quinta temporada de 'The Crown' llega este miércoles a Netflix, dos meses después del fallecimiento de Isabel II, entre críticas y mucha expectación

La separación entre los príncipes de Gales centra la quinta temporada de ‘The Crown’. Imagen: Netflix.

La muerte de la reina Isabel II disparó, si cabe, la expectación por el estreno de una nueva entrega de The Crown, la dramatización ficticia –hay que resaltarlo- de la historia de la familia real británica que arranca con la subida al trono de la monarca y que en su quinta temporada nos acerca a uno de los momentos más convulsos para la Corona, los años 90.

Aunque ya se grababa la sexta entrega, el fallecimiento de Isabel II a los 96 años interfirió en el rodaje de The Crown, que permaneció varios días en suspenso. Pero, como se dice, ‘the show must go on’ (el espectáculo debe continuar) y el día siguiente del funeral las cámaras volvieron a encenderse.

Con un nuevo elenco que se mete en piel de la familia real cuando se enfrenta a sus momentos más duros, especialmente cuestionada por la opinión pública por los sucesos en torno al príncipe Carlos y Lady Di, y la entrada en escena de personajes como Mohamed Al Fayed y su hijo Dodi, la quinta temporada de The Crown, que se estrena mañana 9 de noviembre en Netflix, cobra un nuevo interés a raíz de los recientes sucesos.

Destacan las críticas enfrentadas de quienes la tachan de cruel e injusta (incluido el exprimer ministro John Major, que gobernó en el periodo que abarca esta temporada, que abarca desde 1991 a 1997) y, en el otro extremo, de quienes la consideran la más benevolente con la familia real.

Cómo es la quinta temporada de The Crown

Después de Claire Foy y Olivia Colman, ambas ganadoras de un Emmy por su trabajo en la serie, ahora es la actriz británica Imelda Staunton quien se ciñe la corona al dar vida a la reina Isabel II en su madurez.

Consciente de que los espectadores veremos con otros ojos los nuevos 10 episodios de The Crown debido al fallecimiento de la monarca, la intérprete califica de “responsabilidad” encarnar a una figura tan icónica de la historia reciente.

Sus palabras hacia ella ya dan una pista de lo que podremos encontrar: “una mujer que durante 70 años hizo magníficamente su trabajo”, explica en una entrevista en EFE, para añadir que “he disfrutado mucho metiéndome en su piel porque creo que era un ser humano muy bueno”.

Dominic West como el príncipe Carlos, Elizabeth Debicki como Diana de Gales, Jonathan Pryce como el duque de Edimburgo, Lesley Manville como la princesa Margarita y Olivia Williams como Camilla Parker Bowles son otros de los reemplazos en pantalla.

Elizabeth Debicki se mete en la piel de Diana de Gales. Imagen: Netflix.

Entre las novedades están también Jonny Lee Miller en el papel de John Major, Claudia Harrison como la Princesa Ana, Marcia Warren como la Reina Madre, Salim Daw como Mohamed Al Fayed y Khalid Abdalla como Dodi Fayed.

Qué pasa en la quinta temporada de ‘The Crown’

La quinta temporada de la serie, como decíamos, nos lleva a los años 90, una década explosiva para la familia real británica.

Al acercarse a los 40 años de reinado, Isabel II no solo se cuestiona su papel como monarca y la situación de su país, incluido el ocaso del Imperio Británico, sino que a los profundos cambios que se avecinan en el mundo, desde el colapso de la Unión Soviética al traspaso de soberanía de Hong Kong, se suman sus propios terremotos familiares.

Elizabeth Debicki como Diana de Gales eclipsa en esta temporada a cualquier otro personaje de ‘The Crown’

Los divorcios de la princesa Ana con Mark Phillips y del príncipe Andrés con Sarah Ferguson se suman al mayor de los conflictos reales, la relación a tres bandas entre el príncipe Carlos, la princesa Diana y Camila.

Para Imelda Staunton fue una responsabilidad encarnar a Isabel II. Imagen: Netflix.

Así, mientras el príncipe presiona a su madre para que le permita divorciarse de Diana, lo que genera una crisis nunca vista en la monarquía, y los rumores se disparan, Diana decide tomar el control de su imagen y su relato, rompiendo con el protocolo familiar y publicando un libro que socava el apoyo público a Carlos y deja al descubierto las grietas de la Casa Windsor o concediendo la sonada entrevista en la BBC en la que reveló lo que había pasado como esposa del príncipe y parte de la familia real.

‘Annus horribilis’

Todo ello, sumado al incendio del castillo de Windsor, da idea de los convulso de un periodo que ha pasado a la historia como el ‘annus horribilis’ de la familia real británica.

Los guionistas de la ficción, creada por Peter Morgan en 2016, no rehúyen ninguna de las situaciones tumultuosas ni de los temas difíciles (poniendo al descubierto especialmente la falta de humanidad y casi compasión ante los dramas que enfrentan), si bien es cierto que se abordan desde un prisma bastante respetuoso y benevolente, especialmente hacia la reina.

El foco se sitúa especialmente en la separación de los príncipes de Gales, su repercusión para la corona y también para la vida personal de Lady Di (desde su salida de la casa real hasta que rehízo su vida personal), verdadera estrella de la temporada y que eclipsa a todos los Windsor.

La separacion de los principes de Gales genera una crisis sin precedentes en la Corona. Imagen: Netflix.

Y aquí entra en escena Mohamed Al Fayed (Salim Daw), el millonario empresario egipcio que busca ser reconocido al más alto nivel de la sociedad sirviéndose de su riqueza y poder, al igual que su hijo Dodi, interpretado por Khalid Abdalla, que acaba convirtiéndose en la última pareja de Diana, con el desenlace sabido el 31 de agosto de 1997 en un accidente automovilístico en el Puente del Alma de París.

Presiones a Netflix

Tras la muerte de Isabel II y especialmente en las semanas previas al estreno de la serie hemos escuchado a varias figuras, desde la actriz Judy Dench al mencionado exprimer ministro John Major criticar la serie con calificativos como “injusta, sensacionalista y cruel”.

También ha circulado por los medios británicos la información de que los príncipes Harry y Guillermo (hijos de Carlos y Diana) habrían pedido a Netflix la supresión de algunas escenas, como la entrevista de su madre en la BBC, algo a lo que la plataforma ha hecho caso omiso.

Las críticas llegan desde todos los extremos a ‘The Crown’. Imagen: Netflix.

Paradójicamente, muchas otras críticas han tachado la serie como excesivamente benevolente como la monarquía, casi una defensa de la institución, o como cartas de amor bien a la figura de Isabel II o la de Felipe de Edimburgo, que sale especialmente bien parado en esta entrega.

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