5 ciudades de Europa para visitar en otoño
Aunque el otoño ya está aquí, hay ciudades de Europa en las que aún parece que el verano no se ha ido del todo, ¿sabes cuáles?

La ciudad de Bergen en Noruega. Foto: Visit Norway
El verano va llegando a su fin en muchas partes de Europa, pero para aquellos que no están listos para decir adiós al buen tiempo, aún hay opciones donde el calor y la esencia estival perduran. Desde ciudades costeras que permiten disfrutar de la playa hasta enclaves culturales que brillan bajo el sol otoñal, aquí te presentamos cinco destinos donde el verano se resiste a marcharse y que puedes visitar este otoño para alargar la temporada de sol y diversión.
1. Estoril, Portugal
Si buscas prolongar los días de playa y buen tiempo, Estoril, en Portugal, es la elección ideal. Situada a solo unos kilómetros de Lisboa, esta ciudad costera es famosa por sus impresionantes arenales y su clima suave que se extiende bien entrado el otoño. Estoril es el lugar perfecto para disfrutar de largas jornadas al sol, ya sea tomando un baño en las aguas del Atlántico o relajándote en la arena dorada.
Además de sus playas, la ciudad ofrece una rica historia y una vibrante oferta cultural. No puedes dejar de visitar la Iglesia de San Antonio, un encantador edificio barroco, o el majestuoso Castillo de Estoril, que data de la Edad Media. Otro de sus atractivos es el famoso Casino de Estoril, uno de los más grandes de Europa, que inspiró a Ian Fleming para crear el personaje de James Bond. Con esta mezcla de naturaleza, historia y entretenimiento, Estoril es el destino perfecto para quienes buscan alargar la temporada estival.
2. Basilea, Suiza
Aunque Suiza suele asociarse con los fríos inviernos y la Navidad, Basilea ofrece una experiencia completamente diferente en otoño, con temperaturas agradables y un ambiente que todavía mantiene el sabor del verano. Ubicada en la frontera con Francia y Alemania, esta ciudad es un cruce de culturas y estilos arquitectónicos, lo que la convierte en uno de los destinos más interesantes de Europa.
El centro histórico de Basilea es uno de sus principales atractivos, con la Catedral Basler Münster dominando el skyline y el Ayuntamiento destacando por su vibrante fachada roja. A lo largo del río Rin, los visitantes pueden disfrutar de paseos relajantes mientras contemplan los edificios medievales que rodean la ciudad. Además, Basilea es conocida como la capital cultural de Suiza, con una impresionante oferta de museos, galerías de arte y eventos que mantienen viva la ciudad durante todo el año. Si te apetece disfrutar de un destino cultural sin el bullicio del verano, Basilea es la opción perfecta para un otoño templado.
3. Bergen, Noruega
Para los amantes de los paisajes espectaculares y los destinos del norte de Europa, Bergen es un lugar que no te dejará indiferente. Aunque Noruega es conocida por sus auroras boreales y sus frías noches invernales, en Bergen, la segunda ciudad más grande del país, el otoño ofrece una experiencia completamente diferente. Con su clima suave y sus días soleados, es el momento perfecto para explorar los encantos de esta ciudad portuaria.
El casco histórico de Bergen, con sus icónicas casas de madera de colores alineadas en el muelle de Bryggen, es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y uno de los lugares más fotografiados de Noruega. Además, el funicular Fløibanen te llevará hasta lo alto del monte Fløyen, donde obtendrás vistas panorámicas de la ciudad y los fiordos circundantes. Si te gusta el senderismo, desde aquí puedes emprender rutas a través de montañas y bosques, disfrutando del paisaje otoñal en su máximo esplendor. Bergen es un lugar donde el verano parece resistirse un poco más, haciendo del otoño un momento ideal para descubrir sus maravillas naturales y culturales.
4. Bucarest, Rumanía
En pleno corazón de Europa del Este, Bucarest es uno de esos destinos que sorprende a quienes lo visitan por primera vez. A menudo llamada la «París del Este» por su arquitectura neoclásica y art nouveau, la capital rumana es un lugar que combina historia, cultura y modernidad. Aunque en muchas partes de Europa el otoño trae consigo una caída brusca de las temperaturas, en Bucarest se puede disfrutar de un clima más cálido y agradable durante esta estación.
Los parques de la ciudad, como el Parque Herăstrău y el Jardín Cişmigiu, se llenan de tonos dorados y rojizos, creando un ambiente romántico y acogedor para pasear. Además, el Palacio del Parlamento, uno de los edificios más grandes del mundo, es una visita obligada. Su imponente presencia es un reflejo del pasado comunista de Rumanía y su futuro en constante evolución. Bucarest es también conocida por su vibrante vida nocturna y su creciente escena gastronómica, lo que la convierte en un destino ideal para quienes buscan una escapada urbana con un toque diferente.
5. Edimburgo, Escocia
Por último, pero no menos importante, Edimburgo es otro destino donde el verano parece prolongarse a través de sus encantadores paisajes y su animada atmósfera. La capital escocesa es un lugar donde la historia se mezcla con la modernidad, y durante el otoño, la ciudad adquiere un ambiente mágico gracias a los colores que tiñen sus jardines y parques.
Una de las mejores formas de disfrutar de Edimburgo es caminando por la Royal Mile, la famosa calle que conecta el Castillo de Edimburgo con el Palacio de Holyroodhouse. Desde allí, puedes adentrarte en los Jardines de la Calle de los Príncipes, un oasis verde en el corazón de la ciudad, ideal para relajarte y disfrutar de los últimos días de sol. Además, el otoño es la época perfecta para explorar el Arthur’s Seat, el pico más alto de los Holyrood Park, desde donde se obtiene una vista panorámica impresionante de la ciudad. Aunque las temperaturas empiezan a bajar, la calidez de la hospitalidad escocesa y el encanto de Edimburgo aseguran que el espíritu del verano perdure un poco más.
Estas cinco ciudades europeas ofrecen la oportunidad de prolongar el verano y disfrutar de experiencias únicas este otoño. Ya sea relajándote en las playas de Estoril, explorando la vibrante cultura de Bucarest o admirando las casitas de colores de Bergen, en cada uno de estos destinos, el verano se resiste a desaparecer.