Gordillo despierta una revuelta en su bufete por defender al SEPLA

El abogado y fiscal de la Audiencia Nacional en excedencia que ha asumido la defensa de los intereses legales de los pilotos del SEPLA ante Iberia ha generado también un terremoto en el seno del bufete para el que trabaja: Martínez-Echevarría, Pérez, Ferrero. En el despacho madrileño se ha agitado en las últimas horas las disensiones por parte de algunos socios que no ven con buenos ojos que se aceptara el encargo, a la vista del enfrentamiento que suponía con Iberia, cliente habitual de la casa.

La revuelta interior ha crecido al conocerse que la aerolínea española habría suspendido los casos legales que tenía encomendados al prestigioso despacho, según ha podido saber 02B de fuentes internas no confirmadas por Iberia.

Las razones radican en la incompatibilidad de que los mismos profesionales que defienden sus intereses en varios asuntos sean los encargados después de enfrentarse a la compañía en defensa del colectivo de pilotos, con el que se negocia la reestructuración del grupo aeronáutico.

Honorarios de 250.000 euros

Iberia, que ha declinado pronunciarse sobre este hecho, habría retirado todos los casos abiertos y trasladado esos expedientes a otro bufete. Según fuentes internas de Martínez-Echevarría, los honorarios que se dejarán de percibir podrían ascender a más de 250.000 euros, entre los trabajos correspondientes a la recta final de 2012 y las previsiones para 2013.

Ese quebranto económico ha soliviantado a una parte del bufete y a varios socios implicados. Según las fuentes consultadas por esta publicación, el socio director, Vicente Morató, comprensivo con las causad de incompatibilidad esgrimidas por Iberia, ha procurado calmar a los letrados disconformes con la actuación, las consecuencias y el protagonismo de Gordillo.

Malestar de socios

Con todo, se prevé una tempestuosa reunión en la próxima reunión de socios. Los disconformes subrayan que las áreas afectadas por la cancelación de Iberia no resarcirán sus ingresos con los ingresos procedentes del SEPLA. Además, consideran que la incorporación de ese cliente tampoco conviene a la filosofía del bufete: “Al final –señala una de las fuentes consultadas–, se trata de defender a un sindicato, aunque de técnicos cualificados, y no a nuestra base de clientes corporativos”.

Ignacio Gordillo (Madrid, 1950) ejerció como fiscal de la Audiencia Nacional entre 1980 y 2010. En esa época su figura se popularizó por su intervención en casos vinculados al terrorismo, de la misma forma que se especializó también en grandes escándalos financieros. En Martínez-Echevarría dirige el área de derecho penal.