La Ruta de Eneas, un viaje entre la historia y el mito

La travesía del héroe de la ‘Eneida’ entre la antigua Troya y Roma traza un recorrido a través de la arqueología, la naturaleza y la literatura que promueve las raíces y valores mediterráneos

La Ruta de Eneas es ya itinerario cultural europeo. Foto: Andrea Cuesta | EFE.

Sus hazañas al frente del ejército troyano inspiran la Ilíada de Homero, y su viaje desde Troya al lugar donde sus descendientes fundarían Roma es relatado por Virgilio en la Eneida. Precisamente esa travesía del personaje mitológico Eneas desde la actual desde la actual Turquía hasta Italia, pasando por Albania, Grecia y Túnez, puede seguirse en una ruta que acaba de ser reconocida con la distinción de itinerario cultural europeo.

Otorgado por el Consejo de Europa, la certificación reconoce el prestigio de una ruta que quiere conectar a los ciudadanos, europeos o no, con las raíces y los valores mediterráneos.

La Ruta de Eneas, patrimonio de cinco países, se une así al programa de itinerarios culturales europeos entre los que se cuentan vías tan destacadas como el Camino de Santiago, la Vía Francigena, los Caminos Europeos de Mozart, las Rutas del Emperador Carlos V, la Ruta del Telón de Acero o Destinos Le Corbusier.

La antigua Cartago también forma parte e la ruta. Foto: Pixabay.

Una ruta construida sobre valores mediterráneos

Para Giovanni Cafiero, arquitecto italiano experto en territorio y bienes culturales que dirige la Asociación Ruta de Eneas, su importancia radica en “los valores que promueve, especialmente por la idea de que el progreso viene de la mezcla de culturas y no de las políticas de fronteras” explica en declaraciones a EFE.

La Ruta de Eneas recorre cinco países entre la antigua Troya, hoy en Turquía, hasta Roma

También está entre los objetivos de este proyecto ensalzar la identidad mediterránea, “que conecta a los ciudadanos de toda Europa, desde el sur de Italia hasta el norte del continente, a través de la cultura, la lengua y las instituciones europeas”, apunta Cafiero.

Turquía, Albania, Túnez, Grecia e Italia forman parte de la Ruta de Eneas. Foto: Michele Bitetto | Unsplash.

Y es que, más allá de las aventuras de Eneas, su historia simboliza unos valores que, en los momentos de dificultad y de crisis que atraviesa la sociedad actual, resultan muy importantes, como “la resiliencia, la esperanza en el futuro y la solidaridad entre generaciones”.

Una ruta y cinco países

La Ruta de Eneas se extiende desde las costas de Turquía (Mar Egeo) hasta la región del Lacio en Italia siguiendo los pasos de la leyenda de Eneas narrada por el poeta Virgilio en la epopeya de la Eneida.

Motivo recurrente del arte a lo largo de los siglos (se ha representado en innumerables pinturas, mosaicos o esculturas), la historia de Eneas se convirtió en un patrimonio cultural común a diferentes países y civilizaciones mediterráneas conectadas por las aventuras del héroe.

Mapa de la Ruta de Eneas: Associazione Rotta di Enea.

Héroe de la guerra de la antigua ciudad anatolia de Troya (en la actual colina de Hisarlik, en Turquía), Eneas logró escapar, tras la caída de la ciudad avisado por su madre, la diosa Afrodita, para emprender un largo viaje hasta Italia.

Junto a su padre Anquises y su hijo Iulo atravesaría las actuales Albania, Grecia y Túnez para llegar a Italia. Allí terminarían su viaje en la región del Lacio italiana donde se convirtió en rey y donde sus descendientes, Rómulo y Remo, fundaron la ciudad de Roma, lo que le convierte en progenitor del pueblo romano.

Qué ver en la Ruta de Eneas

Siglos después de la hazaña mitológica, la ruta que sigue sus pasos cruza tres parques nacionales y seis sitios reconocidos como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, atraviesa lugares como la isla de Delos, las antiguas ciudades griegas de Antandro y Pérgamo, el sitio arqueológico de Cartago en Túnez o el monte Etna en Sicilia.

El camino termina en Roma, la ciudad fundada por los descendientes de Eneas. Foto: Francesco Bianco | Unsplash.

Además de conocidos monumentos como el Foro Romano, el Parque Histórico de Troya o el Parque Nacional albanés de Butrinto, el itinerario permite descubrir pequeños pueblos y yacimientos arqueológicos que dejan constancia de los pasos del mito.

También interesante es la conexión de la ruta con la naturaleza en la que se enmarca, hermosos paisajes naturales que salpican el recorrido y que definen también la riqueza del Mediterráneo.

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