Los cielos de otoño regalan la lluvia de estrellas de las Leónidas

Las lágrimas de San Lorenzo, o sea las Perseidas, es la lluvia de estrellas más popular debido a su periodicidad anual y la claridad con que surcan el cielo nocturno.

Pero por supuesto que no es el único fenómeno astronómico de este tipo, porque periódicamente hay otros similares, aunque de una fama menor.

Los luminosos restos de un cometa

Este es el caso de las Leónidas, la irrupción de estrellas fugaces que no son más que restos del cometa 55P/Tempel-Tuttle.

Si bien cada año hay rastros del cometa que pasan cerca de la atmósfera, la máxima intensidad se produce cada 33 años por su órbita irregular. Pero no será el caso de este 2021.

Desde el 6 de noviembre hasta el 30 de este mes las trazas de este cometa están volviendo a cruzar con la trayectoria terrestre.

El recuerdo de la fabulosa lluvia de 1833

Sin embargo, por la distancia que rozarán los restos del cometa la lluvia no tendrá la misma intensidad que en 1833, cuando en América del Norte se registró la descomunal cifra de 100.000 meteoros cruzando el firmamento.

En 1833 se registró uno de los pasos más intensos del cometa, con el registro de más de 100.000 meteoros por hora

Para millones de personas de fuertes convicciones religiosas (o supersticiosos) ese aluvión de estrellas fugaces era el preludio del fin del mundo.

En espera de la gran caída de estrellas

Ese despliegue quizás vuelva a suceder recién en 2031, pero al menos este otoño varias estrellas rasgarán el velo nocturno.

Según el Observatorio Astronómico Nacional (OAN), el pico máximo de las Leónidas será el próximo 16 y 17 de noviembre, cuando habrá entre 10 y 20 meteoros por hora. Claro, es una cifra modesta si se la compara con las Perseidas.

Este momento cumbre será dos días antes de la llegada de la luna llena, el 19 de noviembre, en que la visibilidad disminuye notablemente.

En todo caso, habrá que esperar entre las 4:00 y las 6:00 que será cuando la Luna se esconda en el horizonte y mejoren las condiciones.

Para poder verlas hay que mirar en dirección contraria a donde se encuentra el satélite, en lugares ausentes de contaminación lumínica; preferentemente hacia la constelación de Leo (de ahí su nombre).

Dónde ver a las Leónidas

Entre los sitios destacados de Cataluña para ver a esta huidiza lluvia de estrellas están el Parque Astronómico de Montsec con las zonas elevadas de Saldes (comarca del Berguedà), Albanyà (Alt Empordà) y el Parque Nacional de Aigüestortes i l’Estany de Sant Maurici.

Las Canarias cuentan con numerosos miradores, como el Observatorio del Roque de Los Muchachos o Las Cañadas del Teide; en Valladolid se puede visitar el Centro Astronómico de Tiedra o cerca de Segovia en los alrededores de El Escorial; o en el Observatorio Astronómico de Forcarei o en Campo Lameido en Pontevedra.

También se puede ir a la cima de Puig Major en Mallorca; en la Sierra de Granada o en la zona de Borreguiles en Sierra Nevada o el Parque Nacional de Monfragüe de Extremadura, entre otros puntos de España.