BBVA pone al frente de DCN a Álvaro Aresti tras el cese de Béjar

Distrito Castellana Norte, filial de BBVA y promotora de Operación Chamartín, ha nombrado a Álvaro Aresti presidente del consejo de administración

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El BBVA ha recurrido a sus filas para nombrar al nuevo presidente de Distrito Castellana Norte (DCN), la sociedad que promueve «Madrid Nuevo Norte», el proyecto conocido como Operación Chamartín. Álvaro Aresti, exdirectivo de banca de inversión del BBVA y ligado durante más de tres décadas a la entidad, ha sido elegido para encabezar el macroplan inmobiliario, que levantará 10.500 viviendas y un centro de negocios.

El nombramiento se produce unos días después del cese como presidente de Antonio Béjar, otro directivo ligado al BBVA pero que está siendo investigado -antes imputado- en la Audiencia Nacional por los trabajos encargados por la entidad al excomisario José Villarejo. 

La promotora que impulsa el proyecto de remodelación está participada al 75,5% por el BBVA y el 24,5% por la constructora San José. 

Según un comunicado del DCN, su nuevo presidente era hasta mayo responsable de grandes clientes y finanzas corporativas, en el área de banca mayorista y de inversión del BBVA, banco en el que ha desarrollado prácticamente toda su vida profesional, con la excepción de un bufete de abogados en el que inició su carrera. 

Nacido en Madrid en 1959, es licenciado en Derecho por la Universidad Complutense, tiene el Certificado Europeo de Analista Financiero y un programa de dirección de la escuela de negocios IESE. 

Al frente del mayor proyecto inmobiliario en Europa 

Envuelto en críticas, la Operación Chamartín finalmente recibió luz verde después de 26 años sobre la mesa. El considerado como uno de los proyectos más ambiciosos de Europa será una realidad, aunque no a corto plazo. El proyecto urbanístico supondrá la construcción de 10.500 nuevas viviendas (el 20% de ellas con algún tipo de protección) y un centro de negocios con más de un millón de metros cuadrados de oficinas de «última generación». A ello se sumará una renovada estación de Chamartín. 

A expensas de que la Comunidad de Madrid dé el visto bueno, finalmente se dará alas a un plan que parecía estar gafado: desde 1993, cada vez que el proyecto estaba a punto de salir adelante, algo lo bloqueaba. Ahora, 26 años después, ya es un objetivo real. Sin embargo, habrá que esperar 24 años para ver la ejecución completa del proyecto que supondrá 7.100 millones de euros en inversión y la creación de 200.000 puestos de empleo, entre directos e indirectos.

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