El Govern admite que la cúpula de Nissan no se le pone al teléfono

La consellera Chacón traslada su preocupación a la plantilla, pues la empresa no responde a sus ofertas para que mantenga la producción en Barcelona

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

La Generalitat no encuentra interlocutor en Nissan. El govern asiste al cada vez más probable cierre de la fábrica de la compañía japonesa en Barcelona sin saber la manera de acceder a la cúpula de la empresa. Mientras la plantilla declara una huelga indefinida ante la falta de un plan de futuro, la consellera de empresa, Àngels Chacón, se resigna a decir que está intentando contactar con la dirección en Asia.

En una reunión mantenida este lunes con el comité de empresa, Chacón admitió que no tiene forma de encontrar un interlocutor de alto nivel. Cabe recordar que la consellera visitó la sede de Nissan el pasado mes de noviembre para tratar de abordar la crisis y solamente fue recibida por un directivo de cuarta categoría: Osamu Goto, vicepresidente de Asuntos Gubernamentales. «Si es necesario volveré a Japón con mascarilla y lo que haga falta», dice ahora.

El govern y el Ministerio de Industria presentaron en invierno una oferta para que Nissan mantuviera su centro en la Zona Franca, pero ni siquiera obtuvo respuesta. Y la interlocución no mejoró desde entonces, admiten en la Generalitat. 
En una entrevista concedida a Catalunya Ràdio, la propia Chacón admitió “preocupación” e “intranquilidad” ante la huelga indefinida convocada por la plantilla a partir del próximo 4 de mayo. “Tenemos la conciencia tranquila” al haber hecho todo lo posible, aseguró la consellera«La propuesta incluía la fabricación de un vehículo eléctrico», añadió en una conversación con La Vanguardia.

Nissan Barcelona opera solo al 27% de su capacidad

 

De este modo, la fábrica de Nissan en la Zona Franca se encamina hacia una muerte anunciada al operar solo al 27% de su capacidad. Las cifras entre enero y marzo presentadas esta semana revelan una caída del 38% respecto al mismo trimestre del año anterior. 

Por ello, la plantilla espera una decisión que el presidente de Nissan Europa, Gianluca De Ficchy, aseguró que llegaría antes del verano. Y con el oscuro horizonte que se vislumbra, los trabajadores no quieren volver a sus puestos de trabajo el 4 de mayo para cumplir con un pedido de pick up de Mercedes y luego volver a casa hasta nuevo aviso.

De este modo, convocaron una huelga indefinida tras conocer las proyecciones para volver a trabajar en la planta –la mayor que tiene en el país y la única que ensambla coches–. La filial del gigante japonés quiere reabrir solamente con una línea de producción para cumplir con los pedidos pendientes de la Mercedes Clase X, un vehículo que dejará de elaborar en mayo.

El problema de Nissan es europeo

El problema de los trabajadores de Nissan Barcelona es que la fábrica catalana es una pieza muy pequeña en el complicado ecosistema de la empresa japonesa. El grupo hace meses que se replantea su presencia en Europa, donde las ventas no dejan de caer año a año a pesar del éxito del Nissan Qashqai.

Bloomberg ya informó en octubre que el fabricante sondeaba deshacerse de sus centros productivos en Europa ante la crisis que la azota en el territorio, donde la caída de ventas en 2019 rondó el 20%. La estrategia sería centrarse en las plantas asiáticas mientras su socio Renault se encarga de las instalaciones europeas.

A la misma tesis se sumó Reuters​, que este lunes informaba de una retirada en el VIejo Continente para concentrarse en Estados Unidos, China y Japón. La decisión, según la agencia, se anunciará el próximo 28 de mayo.

Suscríbase a nuestro canal de Telegram para conocer la última hora sobre la pandemia del coronavirus en España, Europa y el mundo.
Carles Huguet

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp