Gas Natural pierde 500 millones al año por los robos de luz en Latinoamérica

El 20% de la electricidad que distribuye en la región es sustraída con enganches ilegales

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

El robo de la electricidad, un fenómeno creciente en los barrios pobres de las grandes ciudades españolas, alcanza dimensiones alarmantes en América Latina. El 20% del suministro que distribuye Gas Natural en los países de la región es sustraído de forma irregular, según explicó el consejero delegado de la empresa, Rafael Villaseca a Economía Digital.

La compañía logró una cifra de negocio de 2.513 millones de euros en Latinoamérica en 2012, según los resultados publicados por la compañía. El robo eléctrico, el problema más acuciado en la región, alcanzó los 502 millones de euros el año pasado.

Seguimiento en Colombia

Aunque el robo de electricidad también comienza a extenderse en España, para la compañía no supone un problema de envergadura como América Latina. “Nos preocupa el fraude en España, lo seguimos y lo combatimos pero no es un asunto grave ni prioritario”, explica el consejero delegado.

La cuarta parte de los ingresos de Gas Natural provienen de América Latina, donde tiene operaciones en México, Brasil, Chile, Perú y Colombia. En este último país es donde la compañía concentrará en los próximos años por reducir las pérdidas producidas por el robo de electricidad y las moras en el pago, según refleja en plan estratégico de Gas Natural-Fenosa 2013-2015.

Pérdidas del 8% en España

La patronal de la industria eléctrica Unesa calculó el año pasado que en España se pierde el 8% de la generación eléctrica por un proceso ineficiente en la distribución y por robos y conexiones ilegales. Expertos del sector aseguran que el 50% de esas pérdidas puede atribuirse a los robos.

Los enganches rudimentarios, de fácil aplicación, son comunes en los pisos ocupados y en familias que han perdido el suministro y que se han conectado de forma ilegal a la red. También han aumentado la manipulación de los controladores de interrupción de potencia, con lo cual un hogar puede consumir una potencia superior a la que en teoría tiene contratada sin pagar más por ello. En internet, abundan foros y páginas que enseñan métodos para robar luz.

El fraude a Iberdrola

El resto de las compañías también sufren el mismo perjuicio. Iberdrola denunció el año pasado a 500 defraudadores (familias y empresas) sólo en la región de Murcia. La compañía, después de haber realizado 1.500 inspecciones, calculó una merma de cinco millones de kilovatios, equivalentes a unos 700.000 euros.

La multinacional remarca que los robos perjudican al resto de usuarios, ya que las pérdidas de electricidad no son asumidas por las empresas sino que repercuten en los incrementos de tarifa del resto de abonados.

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp