La firma Pilma ‘hace las maletas’ para llevar el lujo a las Ramblas de Barcelona

Cuarenta años de historia. Cuatro tiendas. Dos hermanos al mando, Pau y Ricard López Barceló. Y una nueva línea de neogocio: las maletas de lujo para los turistas con un alto poder adquisitivo. La empresa Pilma ha creado una división enfocada en el Travel que ya cuenta con su primer espacio en la calle Serrano de Madrid. Pero es sólo un primer paso. Ahora, la firma también quiere instalar este producto en el centro de Barcelona. Y las Ramblas, por su gran afluencia de turistas, es una zona muy atractiva.

Esta cadena de tiendas de decoración ha evolucionado para adaptarse a los nuevos tiempos. «Entre 2011 y 2012 empezamos a tomar nuevas decisiones. Nuestro sector ha sido uno de los más desfavorecidos con la crisis porque no se centra en las compras prioritarias. Cambiamos entonces el tipo de oferta, haciéndonos más fuertes en cuanto a producto con la marca PLM Design. Comenzamos a hacer adaptaciones y modificaciones al gusto de los clientes e introducimos en nuestras tiendas nuevas firmas», explica Pau López a Economía Digital.

De la mano de Rimowa

Después de haber sufrido una caída del 40%, en 2013 la compañía comienza a vislumbrar cierto repunte de las venta en sus puntos de venta en Barcelona –uno en Sarrià, otro en la Diagonal, en la calle Valencia y un outlet que abrió las puertas al inicio de la crisis–. Fue entonces cuando los hermanos López Barceló entendieron que tenían que ser más globales y decidieron instalarse también en Madrid, pero de la mano de otro sector, el de los complementos, y gracias a un acuerdo con la marca alemana Rimowa, un incono del lujo. «Somos distribuidores suyos desde hace más de treinta años, pero dábamos a sus productos un uso diferente, sobre todo muy enfocado a las listas de bodas», detalla López.

Sin embargo, este tipo de listas han dejado de tener el sentido con el paso del tiempo y, ahora, los novios en lugar de querer muebles, complementos para su nuevo hogar y unas maletas para el viaje de sus sueños optan por una cuenta bancaria. Sin embargo, las maletas de lujo todavía tienen un hueco en el mercado actual, con el foco más puesto en el turista extranjero y, en especial, en el asiático. De ahí nace el concepto Pilma Travel. La tienda que se ha abierto hace unos meses en el centro de Madrid es un espacio más reducido que los tradicionales establecimientos Pilma. Esta tienda cuenta con 240 metros cuadrados, frente a una superficie de entre los 1.300 y los 2.800 metros cuadrados que ocupa Pilma en las calles donde está presente en Barcelona.

Además de Rimowa, Pilma Travel también vende los complementos de FPM, Bric’s y Porsche Design. Y el próximo paso que quiere dar es abrir una tienda en su ciudad natal. Los hermanos López Barceló ven mucho potencial a este negocio. Esperan llegar a facturar un millón de euros a medio plazo.

Zonas prohibitivas de Barcelona

Pero en Barcelona algunas calles prime como el paseo de Gràcia o el Portal de L’Àngel tienen unos precios muy elevados, de modo que las Ramblas, cerca de estas dos zonas comerciales, podría ser una buena, o la mejor, alternativa. «Es una de las opciones que estamos mirando porque tiene mucho tránsito, al igual que Plaza de Catalunya, pero en esta última apenas hay espacio libre. Estamos buscando un local que podamos primero comprar y si no puede ser, entonces alquilar. En Madrid el local es nuestro y en Barcelona queremos lo mismo. Al final, tarde o temprano, saldrá alguna oportunidad», añade uno de los gerentes de Pilma.

La división Travel encaja en las zonas turísticas y en aquellos proyectos de futuro en los que el ocio, el turismo, el juego y las compras sean pilares fundamentales, en palabras de López.

Y si Pilma Travel pronto aterrizará en Barcelona, la compañía no descarta tampoco abrir un establecimiento de decoración en la capital madrileña, aunque es una idea que podría materializarse más bien en 2016. En este caso el cliente que se busca es más local, de modo que sería necesario estar en una zona tan vip.

Internacionalización

Mientras surge ese plan, la compañía también tiene las miras puestas en el extranjero, en concreto en Europa y Latinoamérica. Desde hace un año y medio está inmersa en un plan de internacionalización para vender en Francia, Alemania, Suiza, Austria y Parte de Italia. Además, ya cuenta con socios en Chile y Panamá, dos países económicamente potentes. «Fuera de España entendemos que es más importante tener menos puntos de venta, pero con mayor volumen de compra», añade López. Ahora, entre España y Portugal, Pilma a través de su marca PLM Design está presente en 2.000 puntos de venta.

En la actualidad la mayor parte de la producción de esta empresa familiar se concentra en el extranjero, sobre todo en Lituania, Polonia, Suecia, Indonesia y China. Pero no siempre fue así. Cuando comenzó el 100% de la producción era nacional pero con el tiempo algunos talleres y empresas con las que trabajaban han acabado desapareciendo. Ahora, todavía mantienen algunos socios en España, en Barcelona, Viladecans, San Sebastián, Valencia o Albacete.

Volver a las ventas pre-crisis

De momento, las ventas al cierre de 2014 han crecido un 20%, con una cifra de negocios de 15 millones de euros. Para este 2015, la compañía espera otro crecimiento del 22% y volver, así, a los nieveles pre-crisis, recuperando ese descenso del 40% fruto de la recesión económica. Su buque insignia o piedra angular es la tienda ubicada en la avenida Diagonal de Barcelona que factura unos cinco millones de euros al año. La remodelación de esta vía, asegura López, será sin duda bienvenida. «Es un buen cambio, la tienda saldrá reforzadísima», asegura.

Y entre las asignaturas pendientes: la venta on line (donde todavía no está presente), reforzar su presencia en la hostelería (a través de la decoración de habitaciones y restaurantes de hoteles), y la marroquinería y los bolsos (otro complemento que podría estar en las tiendas incluso con su corner propio).