Las plantas españolas que Alcoa quiere vender generan beneficios millonarios

La compañía cifra en 40 millones las ganancias de las fábricas de Galicia y Asturias, aunque matiza que éstas se derivan de la actividad en otras plantas de la multinacional

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Con un mercado internacional en horas bajas, especialmente como consecuencia de la caída de la demanda china y la entrada de producto foráneo en Europa, Alcoa ha cerrado el pasado ejercicio con un beneficio de 40 millones de euros en sus plantas españolas, controladas a través del holding Alcoa Inespal y de Aluminio Español, donde se engloban las instalaciones de San Cibrao. 

La compañía, que reconoce los beneficios, matiza que las ganancias no proceden exclusivamente de la actividad en A Coruña, Lugo y Asturias. Esto se debe, según fuentes del grupo, a que la contabilidad de las sociedades radicadas en España «no corresponde únicamente a la actividad de las plantas del país, sino a la de otros sitios también», por lo que no recogen de manera fidedigna la situación de las factorías.

Alcoa rehúsa aportar datos económicos de manera individualizada de sus instalaciones. Fuentes de la compañía cifran en más de mil millones la facturación conjunta de las tres plantas.  

Sólo una en positivo

Desde Alcoa destacan que sólo las instalaciones lucenses arrojan un balance positivo. «Las fábricas de A Coruña y Avilés no han logrado dar beneficios en los últimos años», apuntan. En 2014, últimas cuentas disponibles en el Registro, la fábrica coruñesa había aportado al grupo pérdidas de 600.000 euros. Mejor resultado que el del centro asturiano, que aportó cuatro millones en negativo.

En A Coruña sospechan que Alcoa hace un doble juego para perjudicar a sus intereses, a pesar de que en el actual escenario de «análisis» trate de garantizar «el mejor futuro posible para todas las plantas». En este sentido, el presidente del comité de empresa de la planta coruñesa, Juan Carlos López Corbacho, no quiso saber nada de las cifras de la factoría de A Grela ya que, según denuncia, «para la subasta eléctrica nos cuentan como grupo, pero para los resultados no».

Respuestas para todos

Ese doble rasero también se ha hecho notar este martes en las reuniones que los comités de A Coruña y San Cibrao mantuvieron con sus respectivas direcciones. Mientras que en la primera la empresa reconoce abiertamente la existencia de visitas por parte de potenciales compradores, de inversores y de representantes de entidades bancarias junto a los profesionales que elaboran los informes de viabilidad, en la planta lucense insistieron en que se trataba únicamente de empresas auditoras.

En cualquier caso, las direcciones de ambos centros confirman que en las próximas semanas se producirán nuevas visitas, aunque aclaran que las políticas de confidencialidad les impiden revelar la identidad o filiación de los visitantes.

Economía Digital

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