El Gobierno reparte culpas por el apagón: Red Eléctrica programó pocas centrales y las energéticas no absorbieron la tensión

El informe del Gobierno concluye que la causa fue "multifactorial" y que la sobretensión del sistema no pudo controlarse por fallos en la programación de ese día

La vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Sara Aagesen. Carlos Luján / Europa Press

El informe del Gobierno sobre el ‘cero eléctrico’ que provocó un apagón nacional el pasado 28 de abril concluye que la causa fue una mala programación por parte de Red Eléctrica, el operador del sistema, de las centrales para controlar la tensión de la red y que algunos de estos nodos de generación, que estaban retribuidos para apoyar al sistema, «no estaban regulando tensión según lo previsto por la normativa».

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, ha explicado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros el documento elaborado por el comité de análisis para investigar el apagón. La investigación ha descartado un potencial ciberataque y se ha concluido que el detonante fue una serie de oscilaciones que provocaron una sobretensión en el sistema que ni la programación de Red Eléctrica ni la actuación de las centrales pudieron controlar.

En este sentido, Aagesen ha detallado las cinco fases en las que se produjo el ‘cero eléctrico’. La primera se retrotrae al propio 27 de abril, el día antes del apagón, cuando Red Eléctrica programó diez centrales térmicas para el control dinámico de la tensión en el sistema repartidas por todo el territorio nacional. Una actividad que, remarcó la vicepresidenta, suponía que estuvieran disponibles «a cambio de compensaciones económicas».

Sin embargo, en la tarde del 27 una de ellas se declaró indisponible y el operador, en lugar de reprogramar otra central, decidió continuar con las nueve restantes. Fue en la propia mañana del 28 cuando, ante las oscilaciones y tensiones que estaba experimentando el sistema, se decide programar otra para empezar su actividad a las 14:00 de ese día, pero llegó tarde ya que, para entonces, se había producido la caída de tensión generalizada.

De las nueva operativas, «todas y cada una de ellas tenían un grado de incumplimiento», ha dicho Aagesen, en las obligaciones de normativa para hacer frente a ese control de la tensión.

Las oscilaciones que se produjeron en el sistema el 28 de abril (entre las 12:16 y las 12:33) se trataron de estabilizar con la actuación de Red Eléctrica, pero los instrumentos para tratar de controlarlas provocaron una subida de la tensión que provocó una desconexión en cadena del sistema en operadores de Granada, Badajoz, Cáceres, Segovia y Huelva.

«Las desconexiones de generación se dispararon por protección ante la sobretensión», ha dicho la vicepresidenta, aunque ha señalado que «algunas de estas desconexiones ocurrieron de manera indebida».

La responsable de Energía ha querido señalar que el informe, cuyo contenido completo se conocerá esta tarde, no se trata de un juicio ni de una búsqueda de responsabilidades, sino que eso tendrá que hacerlo la propia investigación que luego lleven a cabo la justicia o la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que es el regulador del sistema eléctrico.

Con todo, los ojos vuelven a estar sobre la presidenta de Redeia (matriz de Red Eléctrica), Beatriz Corredor, debido a esa mala planificación del sistema para el día del apagón. Si bien en los días posteriores al apagón hubo un apoyo por parte de Transición Ecológica, hoy la vicepresidenta ha sido menos clara: «Llamo a la reflexión de todos y cada uno de los agentes del sistema eléctrico».

Las empresas también están en el punto de mira. Si bien el informe está anonimizado, a petición de las mismas, el Gobierno ha remarcado que las privadas incurrieron en irregularidades: bien porque no estuvieron plenamente disponibles para realizar ese control de la tensión, bien porque ante el episodio de subida algunas de ellas se desconectaron antes de lo que establece la normativa, fomentando esa reacción en cadena que motivó el colapso.

En base a ese informe, el Gobierno ha anunciado que en el Consejo de Ministros de la próxima semana se aprobará un Real Decreto-Ley con medidas para reforzar el sistema y corregir las disfuncionalidades que permitieron que España se fuera a negro.

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