ESADE quiere recortar salarios a los funcionarios
La escuela de negocios Esade ha hecho público un documento en el que plantea soluciones a la situación económica española. Entre estas se halla un recorte de salario a los funcionarios y abordar el copago de los servicios públicos de educación y sanidad.
El trabajo lo han elaborado los profesores del Departamento de Economía de ESADE, Fernando Ballabriga y Josep M. Comajuncosa.
El primer problema que hay que atajar de manera concisa es la reducción del déficit público. En este sentido, ambos autores coinciden en que, “para lograr rebajar el porcentaje del déficit del 11% actual al 3% propuesto por el Gobierno, aún más importante que el aumento del IVA, es imprescindible la reducción del porcentaje de gasto público sobre el PIB”. Elementos para el ahorro son: el gasto en salarios públicos, es decir, “abordar el tema del número de funcionarios y de su nivel salarial”.
Según el Informe, el aumento de algunos impuestos como el IVA y la recuperación de ingresos perdidos en cuanto se inicie una cierta recuperación, difícilmente superará el propio incremento porcentual del PIB. Por ello, “la corrección del déficit requerirá la reducción del porcentaje del gasto público sobre el PIB”. Además, este ajuste se deberá conseguir en un momento en que la evolución demográfica proyecta un aumento del gasto sanitario y del gasto de las pensiones, de mantenerse la actual estructura”. Por esta razón, y con el objetivo de reducir el gasto público en estos ámbitos, el Gobierno se debería planear la introducción de esquemas de pago fraccional por parte del usuario en la provisión de servicios públicos (copago). En el caso del gasto de pensiones, es necesaria una revisión del sistema de pensiones actual.
Otra de las cuestiones fundamentales para la reducción del gasto público es el desempleo ya que, según la previsión que hacen los autores, en 2010 España alcanzará una tasa de desempleo del 20%. La solución para atajar este problema “debe venir dada por la tan debatida Reforma Laboral”, para la cual, los autores plantean dos vertientes: una a corto y otra a medio plazo. La primera debe incidir en la necesidad de que los salarios se ajusten al nivel y evolución de la productividad de cada sector y empresa. Las segunda deberá centrarse en la mejora progresiva de la propia productividad.