ACS (Florentino Pérez) logra un contrato de 1.465 millones en Nueva York con protección salarial histórica para los trabajadores
ACS lidera un proyecto millonario en Nueva York que combina infraestructura resiliente y protección laboral para los trabajadores locales
Florentino Pérez da un paso más con ACS en Nueva York.
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El grupo español ACS ha logrado una nueva victoria internacional que marca un hito en su trayectoria. Según el rotativo de Cinco Días, esto ha sido posible gracias a su filial estadounidense Turner. De esta forma, ACS se adjudicó un contrato valorado en 1.465 millones de euros, equivalentes a 1.700 millones de dólares, para ejecutar una ambiciosa obra de resiliencia en la zona del Battery Park, en Nueva York. El proyecto tiene como objetivo proteger este sector frente a inundaciones costeras y al aumento del nivel del mar.
La intervención cubrirá un área desde First Place hasta el este de West Street/Route 9A, extendiéndose más allá de Chambers Street. Tal y como avanzaba el digital económico, además de las barreras físicas contra el agua, se prevé la creación de nuevos espacios verdes, buscando no solo mejorar la seguridad ante el riesgo de inundaciones, sino también aportar valor urbanístico y ambiental.
Que ACS lidere una obra de esta envergadura no es casual. Cinco Días confirmaba abiertamente que, con la experiencia de Turner en construcciones orientadas a mitigar el impacto del cambio climático, es un área cada vez más demandada en ciudades costeras,. Por este motivo, la empresa española refuerza su reputación en infraestructuras más resilientes.
Un modelo distinto: protección laboral y participación local
Más allá del reto técnico, este proyecto destaca por su enfoque social. Según Cinco Días, Turner ha firmado un Project Labor Agreement (PLA). Esto hace referencia a un acuerdo que garantiza condiciones laborales dignas, salarios justos, seguridad laboral y prioriza la contratación de trabajadores locales, pequeñas empresas y colectivos desfavorecidos. El rotativo lo describía como una modalidad de contratación progresiva que empieza a consolidarse en obras civiles en Estados Unidos.
Algunos representantes del sector consultados por Cinco Días como el presidente del Consejo de Comercio de Construcción de Nueva York, Gary LaBarbera, advertía que este tipo de contratos: “crean condiciones para el mantenimiento familiar de los neoyorquinos que trabajan en ellos”. Por este motivo, ACS no solo construye infraestructuras, sino que también contribuye a dinamizar empleo local con condiciones laborales mejoradas.
Además, este proyecto, según desvelaban los compañeros de información económica, Cinco Días, es uno de los primeros en utilizar el modelo de diseño y construcción progresiva en Nueva York. Esta fórmula implica una colaboración más estrecha entre la administración local y la constructora para gestionar riesgos y costes de forma permanente. Turner desarrollará la obra en consorcio con SPC Construction.
Una apuesta creciente de ACS por Estados Unidos
La adjudicación llega en un momento, según Cinco Días, en el que ACS intensifica su presencia en Estados Unidos, país que ya representa una parte muy significativa de su cartera de proyectos. La estrategia de la empresa que dirige Florentino Pérez, según el digital económico, no se limita a la construcción tradicional. Estos buscan liderar proyectos de gran escala vinculados a la sostenibilidad, la resiliencia urbana y las infraestructuras modernas. El contrato en Battery Park, tal y como destapaban los compañeros, es un ejemplo claro de esa apuesta que combina exigencias técnicas con compromisos sociales y medioambientales.
Para la ciudad de Nueva York, la obra supone un paso decisivo en su estrategia de defensa ante fenómenos climáticos extremos, inspirados por los devastadores efectos del huracán Sandy en 2012, tal y como apuntaba Cinco Días. En ese contexto, la intervención de ACS/Turner representa una barrera contra futuras inundaciones, pero también un símbolo de cómo deben diseñarse las infraestructuras hoy en día.
Relevante más allá de la construcción
El contrato, según Cinco Días, tuvo una enorme repercusión. Así pues, demuestra que grandes obras de infraestructura ya no se jugaban solo en función del presupuesto o de la capacidad técnica. Los criterios sociales y laborales están entrando con fuerza tal y como hacía referencia el rotativo digital.
Además, el uso del modelo de diseño y construcción progresiva puede sentar un precedente para futuras adjudicaciones públicas en Estados Unidos y otros países. Este sistema, que permite ajustar el proyecto en curso para optimizar costes y mitigar riesgos, ofrece una alternativa más flexible y realista frente a los contratos tradicionales.
El futuro más próximo
La adjudicación de este contrato millonario en Battery Park reafirma a ACS como actor global de primer nivel, capaz de liderar obras de alta complejidad técnica. Pero también la coloca como referente en una transición hacia una construcción más responsable, socialmente comprometida, respetuosa con el medio ambiente y adaptada a los nuevos retos del cambio climático.
Con este proyecto, ACS demuestra que su papel va más allá de levantar infraestructuras. Puede contribuir a construir ciudades más seguras, inclusivas y sostenibles.
