El ‘Make OHLA Great Again’ de José Elías hace el ridículo con un 1%: los Amodio ganan el respaldo minoritario
El empresario catalán apenas suma un 1% de apoyo entre los minoritarios de OHLA y queda aislado con un 9,7% del capital frente al bloque liderado por los Amodio
De I a D: Luis Amodio, José Elías y Mauricio Amodio.
La ofensiva de José Elías para tomar el control de OHLA se ha estrellado contra la realidad de los números. Su intento de aglutinar a los accionistas minoritarios bajo el movimiento Make OHLA Great Again (MOGA) ha cosechado un respaldo testimonial: apenas un 1% del capital habría delegado su voto en la asociación impulsada por el empresario catalán, según confirman fuentes a ECONOMÍA DIGITAL.
José Elías acudía con un 8,7% del capital social, pero sin capacidad de arrastre ni influencia efectiva. Su estrategia pasaba por obtener el apoyo de los pequeños accionistas y utilizar su peso agregado para desplazar a los hermanos Amodio, Luis y Mauricio, del control del consejo. No lo consiguió, ha alcanzado solo un 9,7%.
El resultado: soledad accionarial, nula incidencia en los votos y una revalidación sólida de la gestión actual por parte de la mayoría del capital representado.
Los Amodio, primeros accionistas con cerca del 22% del capital, sumaron a su favor la confianza del 74% del quorum, que representó un 45% de los accionistas totales. Así quedó demostrado en las votaciones clave: la reelección de Luis Amodio como presidente fue aprobada con un 74%, al igual que la ratificación del resto de consejeros propuestos por el grupo mexicano.
Más aún, la junta aprobó por amplísima mayoría (entre el 72% y el 99%) todos los puntos del orden del día: desde las cuentas anuales (99,83%) hasta la política de remuneración del consejo (72%), pasando por la ampliación de capital y la reelección de Ernst & Young como auditor.
El 1% restante, hasta completar el 11% que votó en contra, como máximo en algunos puntos, podría corresponder tanto a fondos institucionales como a pequeños accionistas críticos con algunos de los acuerdos adoptados en la junta.
Elías lanzó MOGA con la intención de canalizar el descontento de los minoritarios, presentándose como alternativa regeneradora y defensor de una nueva etapa en la compañía. Sin embargo, esa propuesta no ha calado. Según fuentes del mercado, el respaldo delegado a la iniciativa fue marginal, en torno al 1% del capital. Una cifra ridícula en comparación con las expectativas públicas del empresario.
OHLA, gigante sin Elías
Desde el estrado, Luis Amodio no dejó pasar la oportunidad de responder, aunque sin nombrar directamente a Elías: «OHLA sigue creciendo a pesar de algunas personas que han intentado destruir el buen hacer de la compañía«, ha afirmado.
El presidente de la constructora defendió con contundencia la gestión del consejo y los avances conseguidos: reducción de deuda por 534 millones, generación de caja, mejora de márgenes y una cartera récord de 9.000 millones de euros. «Hemos conseguido una empresa más sólida, más estable y más preparada», ha remarcado ante los accionistas.
El resultado de la junta no solo consolida el poder de los Amodio, sino que envía un mensaje claro al mercado: los minoritarios, lejos de rebelarse, han optado por la continuidad y la estabilidad. El activismo corporativo de Elías, al menos en esta ocasión, ha terminado en un sonoro fracaso.