De Aluman a Malasa: los grandes proveedores de Inditex vuelven a beneficios
Los dos proveedores de la dueña de Zara han salido de números rojos tras dar carpetazo a la crisis del Covid-19
Imagen de archivo de un operario del Grupo Malasa
Los históricos proveedores del grupo Inditex dan carpetazo a la crisis del Covid-19. Aluman, con sede en Arteixo, y Malasa (Maderas Lamelas), afincada en Cambre, dejan atrás los números rojos y logran beneficios millonarios tras superar el golpe de la pandemia.
Y es que el Grupo Malasa revela en sus cuentas anuales que en solo un año ha pasado de perder 8,4 millones de euros a embolsarse unas ganancias de 3,7 millones de euros. La firma especializada en la fabricación de muebles y tarimas y que ha ido de la mano de Inditex durante su expansión internacional ha aprovechado el empujón de una cifra de negocio que se ya roza los 100 millones de euros.
En concreto, Grupo Malasa, que engloba una docena de filiales en España (Fresno Metal o Noa Madera Creativa, entre otras), Portugal o México, cerró el ejercicio 2021 con una facturación de 99,8 millones de euros. Se trata de un rebote del 53,8% respecto a un año marcado por la crisis del Covid-19.
Reordenación y diversificación
De esta forma, la compañía ya logra unos niveles de ventas solo un 8% inferiores al récord histórico que cosechó en 2019. Además, Malasa destaca que esta es la mayor facturación «desde que tiene la actual configuración societaria» se ha disparado un 53,8% pese a verse golpeada por «el impacto de la postpandemia» al «menos en los seis primeros meses del ejercicio».
La firma con sede en Cambre ha dado un empujón a su cuenta de resultados tras una reordenación societaria y un proceso de ampliación de su cartera de clientes. «El grupo ya era consciente antes de la pandemia de la necesidad de ampliar tanto mercados, como clientes y sectores. La llegada de la pandemia ha acelerado este proceso. El grupo está ampliando tanto los mercados donde opera como diversificando la cartera de clientes», destaca en su informe de gestión.
«Esta diversificación le está permitiendo entrar en sectores de negocio de hotelería, restauración y viviendas mientras consolida el negocio del retail con nuevos clientes», concluye la compañía, que ya cosecha el 70% de sus ventas en el extranjero.
Tras los pasos de Aluman
Malasa, que elevó su plantilla un 9% hasta los 710 trabajadores en 2021 y que tiene capacidad para realizar 1.500 encargos al año, ha seguido el mismo camino que otros grandes proveedores de Inditex, como es el caso de Aluman. La firma con sede en Arteixo ha pasado de perder 5,7 millones de euros en un 2020 marcado por la pandemia a embolsarse 813.000 euros en un 2021 en el que facturó 70,3 millones de euros (un 4% menos que el ejercicio anterior).
La empresa especializada en carpintería metálica y de aluminio encontró en su segmento de construcción para retail la principal palanca para su cuenta de resultados. No en vano, esta aportó unos ingresos por valor de 13 millones de euros, lo que supone un salto del 84% respecto a 2020, pero que no le sirve, sin embargo, para igualar a su rama de «proyectos», que generó 37 millones.
Kimak, la antigua Caamaño, se descuelga
De esta salida de números rojos entre los grandes proveedores gallegos de Inditex se descuelga, por el contrario, Kimak Solutions. El grupo anteriormente conocido como Caamaño ha mejorado sus resultados, pero sus cuentas siguen teñidas de rojo. No en vano, la firma afincada en Alvedro (Culleredo) cerró su ejercicio fiscal 2021 con unas pérdidas por valor de 2,37 millones de euros.
Se trata de una cifra que representa algo menos de la mitad que los 5,26 millones que se dejó en un 2020 en el que se vio afectada, al igual que Malasa o Aluman, por el golpe del Covid-19 y la parálisis de la actividad económica. Tras recurrir a préstamos del Instituto de Crédito Oficial (ICO) y a diferentes expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) para su plantilla, la empresa propiedad de la vasca Kider maneja expectativas de «crecimiento sostenido para el ejercicio 2022«.
