Norvento, Windar, Statkraft… Las empresas que se reunieron con Teresa Ribera por las ayudas a las renovables

La ministra presentó el PERTE de energías renovables a asociaciones y empresarios gallegos a la vez que destacó que hay 35 proyectos de hidrógeno verde presentados ante Transición Ecológica

La ministra de Transición Ecológica, Terea Ribera, en la reunión mantenida con empresas y asociaciones sobre el PERTE de las energías renvables

La ministra de Transición Ecológica, Terea Ribera, en la reunión mantenida con empresas y asociaciones sobre el PERTE de las energías renvables

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La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, realizó este jueves una tournée por Galicia en toda regla. Mantuvo reuniones con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y con el de la Diputación de A Coruña y secretario xeral del PSdeG, Valentín González Formoso, visitó la Ría do Burgo, cuyo dragado se iniciará en unos diez días y presentó en A Coruña, ante asociaciones y empresas el Proyecto Estratégico de Recuperación y Transformación Económica de Energías Renovables, Hidrógeno Renovable y Almacenamiento, el llamado PERTE de las renovables. Una oportunidad para muchas compañías de la comunidad ya que, a través del mismo (aprobado el pasado diciembre por el Gobierno) se movilizarán inversiones superiores a los 16.300 millones de euros para desarrollar proyectos y tecnologías ligados a la descarbonización. De ese total, más de 6.900 millones procederán de fondos públicos. Calcula el ministerio que, en toda España, los proyectos estratégicos que generá esta línea de ayudas crearán unos 280.000 empleos entre directos e indirectos.

En la presentación del PERTE, Ribera destacó el potencial de Galicia en dos ámbitos. El de la eólica marina (pendiente en todo caso de la aprobación de los Planes de Ordenación del Espacio Marítimo que delimitarán las áreas para su ubicación) y el del hidrógeno renovable. No es para menos ya que, según reveló, el Ministerio para la Transición Ecológica recibió 195 propuestas desde la comunidad a las distintas manifestaciones de interés lanzadas, entre las que destacan 35 proyectos de hidrógeno verde, que llevan aparejados unos 700 millones de inversión.

Los participantes

Teniendo en cuenta esos datos, la lista de empresarios y asociaciones convocadas a la presentación de la ministra no es baladí. No estaban convocadas las grandes compañías estatales con intereses en el sector renovable de la comunidad gallega, de Iberdrola a Naturgy. Estas ya fueron informadas en Madrid, cuando el PERTE recibió la luz verde del Consejo de Ministros. En Galicia, en un encuentro en la Delegación del Gobierno en el que también participó su máximo responsable, José Miñones, acudieron 11 empresas y asociaciones.

Según ha podido saber Economía Digital Galicia, a nivel empresarial, al encuentro habrían acudido representantes de las compañías gallegas Greenalia, Forestal del Atlántico y Norvento Enerxía, así como de la asturiana Windar Renovables y de la noruega Statkraft.

La ministra de Transición Ecológica presenta ante el empresariado de A Coruña el PERTE de las energías renovables
La ministra de Transición Ecológica presenta ante el empresariado de A Coruña el PERTE de las energías renovables

En el caso de las asociaciones, la terna la habrían completado Acluxega, el Clúster da Xeotermia Galega; la patronal del metal Asime; EGA, la Asociación Eólica de Galicia, y Cluergal, el Clúster de Energías Renovables de Galicia, además del presidente de la Confederación de Empresarios, Juan Manuel Vieites, y del Instituto Tecnológico de Galicia.

Compañías y proyectos

Lo cierto es que todas las firmas que acudieron al encuentro tienen en marcha una importante cartera de proyectos verdes en la comunidad. Norvento, la compañía de Pablo Fernández Castro, opera unos 250 megavatios eólicos en Galicia. La compañía tiene en marcha un proyecto de la mano de Grupo Lence y Agroamb para la creación de una planta de gestión circular de residuos y generación de biogás que lleva aparejada una inversión de 7,5 millones de euros.

Greenalia, presidida por José María Castellano, suma en estos momentos una cartera de proyectos de casi 3.280 megavatios en Europa y de 840 en Estados Unidos. En la actualidad, y dentro de los proyectos Eolo I y II tiene en marcha el desarrollo de 10 parques eólicos en Galicia. Además, acaba de alcanzar un preacuerdo con Alcoa por el cual, mediante contratos de media y larga duración, los PPAs, suministrará energía limpia a la planta de aluminio primario una vez se reactiven las cubas, a partir de 2024.

Otra empresa inmersa en las políticas de transición energética y que también participó en la reunión es Forestal del Atlántico, con sede en Mugardos. Filial de Gadisa, el grupo de la familia Tojeiro, tiene en marcha un proyecto para desarrollar un nuevo sistema para eliminar las emisiones en los procesos industriales de generación de combustibles. La idea es integrar diferentes tecnologías para poner en el mercado combustibles con cero emisiones netas, entre las que se encuentran la fabricación de hidrógeno verde y la captura de Co2. Su proyecto, Triskelion, ya ha sido seleccionado por la Comisión Europea dentro del programa Innovation Fund.

La noruega Statkraft tiene en estos momentos tres parques eólicos en proyecto en Galicia, repartidos entre la provincia de Ourense y la frontera con León. Suman 446 MW y, según la compañía, requerirán de una inversión de 320 millones de euros.

A la cita con Ribera también habría acudido un representante de Windar, compañía consorciada con Navantia que el pasado verano selló un acuerdo con Iberdrola para la fabricación y suministro de cimentaciones para futuros parques eólicos marinos. Según se anunció en su momento, mediante la alianza, entre el periodo comprendido entre 2023 y 2025, la energética vasca realizará pedidos por valor de hasta 400 millones de euros.

Concurrencia competitiva

El propio texto del PERTE de las energías renovables indica que el apoyo económico del Gobierno a los proyectos se realizará mediante convocatorias de concurrencia competitiva . Se tendrá en cuenta la participación de pymes, el impacto sobre la cohesión territorial, la transición justa, la creación de empleo y la innovación, aunque tendrá prioridad la inversión a corto plazo “que sea compatible con la consecución de las metas fijadas para el medio y el largo plazo”.

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