La brecha de PIB entre Madrid y Cataluña seguirá creciendo este año y en 2026
Una política intervencionista en ámbitos clave como el mercado inmobiliario y una fiscalidad abusiva frenan el intento de Cataluña de escalar al liderato del crecimiento entre las CC.AA
Si habláramos de fútbol y no de economía Cataluña, a duras penas, apuntaría a clasificarse para la Conference League dado que es la séptima comunidad autónoma en crecimiento, una décima por encima de la media española pero dos décimas por detrás de la Comunidad de Madrid.
Mientras Cataluña crecerá al 3,1% la Comunidad de Madrid lo hará al 3,3%. Este es uno de los datos más destacados del Observatorio regional del BBVA correspondiente a octubre de 2025 que se dio a conocer la semana que hoy finaliza.
Este 2025 la Comunidad Valenciana, Canarias, la Región de Murcia, la Comunidad de Madrid, las Islas Baleares y Andalucía crecerán más que Cataluña. La previsión para 2026 de Cataluña es buena, pues en junio la previsión era de un crecimiento del 1,5%, dos décimas por debajo de la media nacional, y ahora se ha rectificado al alza hasta el 2,3% igualando la previsión para el conjunto de España.
El año próximo Cataluña continuará situada en séptimo lugar en crecimiento por detrás de la Comunidad Valenciana, Galicia, la Comunidad de Madrid, la Región de Murcia, la Comunidad Foral de Navarra y Aragón. Una vez más el año próximo Madrid crecerá dos décimas por encima de Cataluña.
Mientras Cataluña crecerá al 3,1% la Comunidad de Madrid lo hará al 3,3%
En definitiva, Cataluña quiere, pero una política intervencionista en ámbitos clave como el mercado inmobiliario y una fiscalidad abusiva frenan su intento de escalar al liderato del crecimiento entre las CC.AA. Un mal dato para Cataluña es que está a la cola en impacto en su PIB en licitaciones y subvenciones de los fondos New Generation de la Unión Europea al superar por poco el 2% del PIB frente a la comunidad líder en capitalización de estos fondos que es Aragón con un impacto del 5% sobre su PIB y lejos del 3,2% de la media nacional.
Los datos turísticos a nivel nacional no han sido todo lo buenos que se esperaban durante los primeros ocho meses del año y el sueño de los 100 millones de visitantes ha quedado aplazado para mejor ocasión. Las pernoctaciones hoteleras en el conjunto del país presentan un dato casi plano con un incremento de pocas décimas por encima del 0% y Cataluña junto a Cantabria, Asturias y Extremadura son las cuatro comunidades con un dato negativo. A pesar de este mal registro la solicitud de visados de obras para infraestructuras turísticas y deportivas en Cataluña se ha doblado con relación al dato del año anterior.

Por el contrario, Cataluña presenta un buen dato de inflación en los nueve primeros meses del año, ligeramente por debajo de la media nacional y los salarios pactados por convenio durante este periodo están unas décimas por encima de la inflación con lo que es de esperar que no se produzca una pérdida de poder adquisitivo entre los catalanes al finalizar el presente año.
En el ámbito de la construcción a pesar de los anuncios del presidente de la Generalitat, Salvador Illa, de hacer un esfuerzo constructor y de colaboración público-privada los datos sitúan a Cataluña justo en la media nacional con hasta nueve comunidades por delante con mayor dinamismo constructor. Quizás este dato justifica que en déficit de viviendas Cataluña ocupe el tercer lugar solo por detrás de la Región de Murcia y la Comunidad Valenciana.
La mejor conclusión a la que se puede llegar es que si bien no hay razones para la alarma si parece obvio que Cataluña tiene una regulación que la autolimita derivada de un contexto político inestable y escorado a la izquierda que le impide explotar todo su potencial.