Cataluña feliz de ser deficitaria energéticamente

Cataluña cuenta con centrales nucleares en Ascó y Vandellós (Tarragona), que por orden del gobierno central y con el aplauso de la Generalitat cerrarán en 2030

Fue, en su día, muy celebrada y premiada la película Alcarrás, una alegoría a seguir trabajando en campo y no sucumbir a los presuntos cantos de sirena de las empresas que compran tierras para instalar campos solares.

La realidad es que todo agricultor que ha transformado su propiedad de labranza a terreno para energía renovable, en parte ha sido empujado a ello por una administración que ha permitido la competencia desleal de países terceros, que ha machado a los agricultores con burocracia e impuestos y ha convertido en inviable su actividad hasta dejarle sin sucesión y forzarle a vender.

Cataluña cuenta con centrales nucleares en Ascó y Vandellós (Tarragona), que por orden del gobierno central y con el aplauso de la Generalitat cerrarán en 2030. Estas centrales, que hoy proporcionan más del 50% de la energía eléctrica de Cataluña, sí, efectivamente, dejan de operar, llevarán a Cataluña a vivir apagones constantes. No es una hipótesis, es una certeza.

Las dos nucleares catalanas producen siete veces más energía que todos los campos eólicos de Cataluña, nueve veces más que todos los pantanos y cincuenta y cinco veces más que toda la energía solar instalada en Cataluña.
Cataluña necesita hoy, con las nucleares en funcionamiento, importar el 14% de la energía que produce. Actualmente, en Cataluña hay quince proyectos eólicos en espera de autorización, pero el tiempo de demora que la administración se toma en conceder dicha autorización es de 1.112 días ¡Más de 3 años!

La Cataluña de hoy no es autosuficiente en energía. Por ejemplo, la provincia de Girona es deficitaria energéticamente y depende de la interconexión con Francia, que produce energía mediante centrales nucleares.
Precisamente en Girona desde la década anterior está paralizado un parque eólico marino, en el Cabo de Creus. Aunque a finales de 2024 la Generalitat anunció que quería activar el proyecto para que entrara en servicio en 2026, la realidad es que mientras otras CC. AA. cuentan con grandes zonas de producción eólica y solar, en Cataluña las restricciones de los sucesivos gobiernos independentistas han paralizado casi todos los proyectos.

De hecho, la media española en producción en energía renovables es algo superior al 50% y en Cataluña solo llega al 15%, cuando en la vecina Aragón es del 80%. La paradoja es que en nombre del medio ambiente en Cataluña se han paralizado grandes proyectos y el resultado es que Cataluña solo aporta el 4,8% de la energía renovable que se produce en España.

Cataluña solo aporta el 4,8% de la energía renovable que se produce en España

Los obstáculos de la administración no solo han afectado al norte de la comunidad autónoma, también al sur. El proyecto de líneas de muy alta tensión entre Aragón y Cataluña fue archivado por el ministerio a finales del año pasado. La Diputación de Tarragona, gobernada por una coalición entre ERC y el PSC, fue una de las entidades que más se opuso a este proyecto. La oposición es una de las contradicciones constantes de la política de nuestro país, dado que el proyecto tenía el visto bueno del ministerio gobernado por el mismo partido socialista y apoyado parlamentariamente por ERC, que luego planteaba todo tipo de impedimentos al mismo hasta hacerlo descarrilar y provocar su archivo.
¡Tenemos una clase política que adora la regresión y el decrecimiento!

El objetivo de esta línea de alta tensión era enviar a Cataluña parte de la energía eólica sobrante que se produce en Aragón. Esta energía sobrante no es un capricho, ahora Aragón la usará para los centros de datos que se instalarán en esta comunidad y que serán fuente de empleo y crecimiento.

Deja una respuesta