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El tercer sector saca pecho en un contexto de creciente polarización
Las principales fundaciones denuncian la falta de profesionalización en el sector en un momento en el que se cuestiona el valor de lo social
ponentes en el I Encuentro del Tercer Sector
El contexto de polarización que atraviesa España no solo afecta a la política o la sociedad: el tercer sector -y en consecuencia su acción social- es uno de los grandes damnificados, según denuncian los representantes de algunas de las fundaciones punteras en España durante el I Encuentro del tercer sector organizado por ECONOMÍA DIGITAL en colaboración con Fundación “La Caixa” y celebrado ayer en Madrid.
Durante la jornada se abordaron los principales desafíos a los que se enfrenta el sector, entre los que destacaron la falta de profesionalización del sector en las administraciones públicas, la ausencia de promoción internacional o el complicado momento que atraviesa el valor de lo social.
En defensa del sector, Silverio Agea, director general de la Asociación Española de Fundaciones, denunció la ausencia de datos públicos y falta de profesionalización de la administración pública, recordando que actualmente incluso existen varias asociaciones con el mismo nombre, algo impensable en el Registro Mercantil.
El presidente de la Asociación Española de Fundaciones no solo puso sobre la mesa el “incuestionable valor” del sector en materia social, también recordó el importante papel del sector como empleador y motor económico.
Agea denunció la inexistente conexión entre registros autonómicos y estatales, algo que resulta incomprensible para un sector que representa el 2,4% del PIB anual y que emplea a más de 600.000 personas, según datos de la asociación.
A las reclamaciones de Agea se sumaron las preocupaciones de Marc Simón, subdirector general de Fundación “La Caixa”, y Lourdes Márquez, directora de Alianzas y Relaciones Internacionales de Fundación ONCE, por el contexto político-social actual en el que la polarización amenaza gravemente a las iniciativas filantrópicas. “Estamos viviendo un momento complejo en el que se pone en cuestionamiento el valor de lo social”, afirmó Márquez.
En la misma línea, Marc Simón reconoció la reciente desvirtualización de la cohesión social que afecta directamente al sector. “Una sola iniciativa que va mal hace más ruido que un millón que van bien”, apostilló.
“Una sola iniciativa que va mal hace más ruido que un millón que van bien” – Marc Simón
Fundaciones: mitos y realidades
En defensa de los fantasmas que en ocasiones sobrevuelan el sector, durante el encuentro se desmontó el mito de que las fundaciones viven de los fondos públicos, Actualmente en el sector tan solo el 25% de sus fondos tienen origen en de las arcas públicas y fundaciones grandes como ONCE o “La Caixa” financian prácticamente la totalidad de sus proyectos con fondos propios.
Simón comentó que difícilmente puede una fundación sobrevivir únicamente de los fondos públicos y fórmulas que lo han intentado finalmente se han visto en momentos de crisis. El uso de los fondos en el sector es transparente y responsable.
Además, el subdirector de la Fundación “La Caixa” destacó que entre los cientos de convenios al año que realiza la fundación con entidades privadas es muy extraño observar alguna incidencia, e incluso algunos años no se ha registrado ninguna.
Reconocimiento social
Otro asunto del que se habló en el encuentro fue la falta de promoción y reconocimiento del sector fundacional en España.
El sector no solo representa un importante activo en la economía y el empleo, sino que también sienta un precedente en acción social en toda Europa con modelos innovadores y alianzas que logran un impacto real y tangible.
Desde Fundación ONCE, mayor empleador de personas con discapacidad en Europa y Fundación “La Caixa”, entres las tres fundaciones más grandes en Europa, reivindicaron que se debe dar visibilidad al impacto en Europa. La dimensión y la configuración de alianzas innovadoras han sentado un precedente cuyo impacto no ha sido debidamente reconocido a nivel internacional.
En un sector heterogéneo y altamente atomizado, las entidades se unen en agrupaciones como la Asociación Española de Fundaciones o Philea, la primera asociación europea de la filantropía y el sector fundacional presidida por Fundación La Caixa para formar una única voz con la que recordar su impacto, defender su acción y hacer oír sus reclamaciones.