Bruselas rectifica: la hipotética secesión de Catalunya es un ‘problema’ de Rajoy
La Comisión evita hacer alguna especulación sobre los escenarios posibles ante la independencia
“Lamento que se hayan malinterpretado mis palabras”. Así ha rectificado la Comisión Europea en boca de su portavoz, Olivier Bailly, sobre la hipotética secesión de Catalunya. El mismo representante que el martes dejó claro que si la región declarara la independencia quedaría automáticamente fuera de la Unión Europea y no podría ser un estado miembro sin la unanimidad del resto de socios.
Tras una manifestación que congregó a un millón y medio de personas y ha tenido repercusión en los principales medios de comunicación internacionales, el Ejecutivo comunitario se ha lavado las manos en el asunto. «En el escenario hipotético de que una parte de un estado miembro quiera abandonar ese estado miembro, y no menciono a ninguna región de Europa, en primer lugar es un asunto interno dentro de ese estado miembro definir esos acuerdos», ha precisado Bailly.
El portavoz ha dejado claro que no haría ninguna otra apreciación sobre la demanda independentista catalana. “La Comisión no puede especular sobre ninguna consecuencia potencial según la legislación de la UE», ha reconocido. Un punto de vista que comparte el vicepresidente comunitario y responsable de Competencia, el español Joaquín Almunia. En una entrevista con la cadena SER ha afirmado que sacar “conclusiones políticas concretas” tras la multitudinaria protesta requiere “tiempo y prudencia”.
Derecho internacional
Ambos dirigentes han recordado que el Derecho Internacional ya establece varios escenarios posibles para que un territorio consiga la independencia. “No compete a la Comisión especular sobre qué elecciones se harían. No nos concierne», ha insistido Bailly.
Tampoco ha querido hacer una valoración explícita sobre la manifestación independentista. «No tenemos comentarios particulares sobre esta protesta», ha zanjado.
