Discrepancias entre las regiones ante la inminente retirada de las mascarillas en interiores

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció este domingo la inminente retirada de las mascarillas en interiores ante la buena evolución de la pandemia del coronavirus en España, donde los indicadores de las comunidades autónomas mantienen una tendencia a la baja desde hace varias semanas. Sin embargo, las regiones no han llegado al consenso para aplicar esta medida en cuestión.

Mientras la capital ha exigido abiertamente que se retire esta obligación, confirmando que la Comunidad de Madrid llevará al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud de este jueves el debate sobre acabar con las mascarillas en ciertos espacios interiores, el País Vasco y Extremadura han manifestado el rechazo a esta medida hasta que no haya un consenso sobre su aplicación.

De hecho, la Junta de Extremadura ha criticado a aquellas comunidades «sensacionalistas» que están posicionándose sobre esta medida sin haber pasado previamente por el «consenso» y el «acuerdo» de todas las regiones en el Consejo Interterritorial, y sin haber abordado informes científicos que lo avalen. En la misma línea, la consejera de Salud del País Vasco, Gotzone Sagardui, ha subrayado que la retira de mascarillas se debe adoptar «de una manera razonada y fundamentada», siguiendo los criterios de los expertos en salud pública y teniendo en cuenta las futuras repercusiones que puede tener en el futuro.

Otras comunidades autónomas, en cambio, han esquivado posicionarse a favor o en contra de medida, apelando a los criterios técnicos que se dictaminen desde el Ministerio de Sanidad. Sin embargo, en las últimas horas, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, se ha mostrado partidario de una retirada de la mascarilla en espacios de interior, aunque de manera «gradual y responsable».

A pesar de la falta de acuerdo entre las comunidades, Pedro Sánchez ha avanzado la probable aprobación de la medida, aunque desde el Gobierno se encuentran a la espera de la decisión del departamento de Carolina Darias. De esta manera, España vuelve a dar un paso más en la desescalada. La sexta oleada pierde fuerza en todos los indicadores de trasmisión, que han bajado de forma acusada desde mediados de enero: en más de un 80% en las últimas seis semanas y en un 30% en esta última.

Además, cabe destacar que este pasado sábado, el país también ha dado luz verde al fin de las cuarentenas para todos los contactos estrechos de positivos por Covid-19, lo que afecta principalmente a las escuelas ya que los últimos en guardarla eran las personas no vacunadas. Los menores de 12 años son quienes menos han completado la pauta de vacunación.