Yolanda Díaz marca distancia con el PSOE: Podemos no presentará enmiendas a la malversación

"Soy clara. Unidas Podemos no formula enmiendas con un tipo penal conocido como malversación", sentencia la vicepresidenta

La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, mantiene un encuentro con varias plataformas y organizaciones del Servicio de Ayuda a Domicilio, este miércoles, en la sede del Ministerio, en Madrid. EFE/Mariscal

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Unidas Podemos no presentará enmiendas sobre el delito de malversación. Así lo ha asegurado este jueves la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz. Desde la formación morada desconfiaban de esta reforma ya que consideran que puede beneficiar a corruptos, algo que el PSOE niega

«Soy clara. Unidas Podemos no formula enmiendas con un tipo penal conocido como malversación», ha asegurado la también ministra de Trabajo a su llegada a la reunión de ministros de Empleo de la Unión Europea que se celebra este jueves en Bruselas. La dirigente asegura que la formación morada tiene «posición propia» y que este viernes, día que concluye el plazo para presentar enmiendas a la proposición de ley que sustituirá sedición por un delito de desórdenes agravados, dará a conocer las de su partido.

«Soy clara. Unidas Podemos no formula enmiendas con un tipo penal conocido como malversación»

“Lo que estamos haciendo es, como llevamos haciendo desde hace muchos meses, trabajar por un país con más derechos, más avanzado democráticamente y desde luego ahí nos van a encontrar y ahí verán que son cuales son las enmiendas que formulamos”, ha agregado. Se prevé que ERC solicite los cambios sobre malversación este viernes, una negociación discreta que lleva tiempo sucediendo entre el partido y el Gobierno.

La justificación del Gobierno

Estas palabras de la vicepresidenta llegan justo dos días después de que el presidente del Gobierno expresa en una conversación informal con periodistas en el Congreso de los Diputados la posibilidad de reformar este delito. Eso sí, aclaró que esta modificación no supondría ningún retroceso en la lucha contra la corrupción.

Según el Ejecutivo, solo hay que tener en cuenta el derecho comparado y mirar a los países de alrededor para medir bien cómo se deben acatar esos cambios, y diferenciar bien qué es corrupción política y qué no. Para distintos miembros del Consejo de Ministros, en Francia, Italia, Alemania y Portugal se diferencia entre malversación y corrupción política, y por eso, a su entender, esta reforma no acarreará «coste electoral». «Habrá cero empatía con ningún corrupto», insistieron fuentes gubernamentales.

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