Las estafas de las compras por Internet están al acecho

La comodidad de comprar por Internet requiere agudizar las precauciones para evitar sorpresas e incluso caer en timos cibernéticos

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La rapidez, la posibilidad de conseguir mejores ofertas y la comodidad de disponer de millones de productos a un toque del ratón son algunas de las ventajas de las compras online. Pero las estafas y la ciber criminalidad están a la orden del día, por lo que hay que extremar las precauciones al momento de realizar una operación de compra o una transferencia por Internet.

No hace falta meterse en procedimientos complejos, sólo es cuestión de seguir unos pasos y tener un poco de sentido común.

 

Actualizar el navegador y el antivirus

La seguridad del ordenador es clave, y también conviene buscar alguna aplicación que proteja los datos del móvil y la tableta electrónica. Si se instala un antivirus, periódicamente se actualiza y también renueva sus complementos. También tiene funciones ‘anti-phishing’, que analiza las páginas donde se realiza una compra para verificar que sea segura y no roben la identidad.

 

Conocer la tienda

Hay tiendas virtuales que son universalmente conocidas, como Apple, Amazon o Ebay, entre otras. Pero si hay dudas sobre el comercio donde se está dejando la tarjeta, conviene realizar una búsqueda previa en Google, y a lo sumo, agregando palabras como «estafas» o «robo de identidad». Si no hay resultados a la vista, ya es una tranquilidad, aunque no es todo.

También se puede confirmar su seriedad por medio de páginas web como Webutation, donde se pone la URL de la página y se informa de su grado de seguridad.

 

Ver la información de la empresa

En España, en el apartado ‘Quienes somos’ se debería incluir los sellos de seguridad electrónica, como los certificados VeriSign, Trust-e o Confianza Online, que permiten confirmar la autenticidad de la página.

Y aunque sea aburrido y largo, hay que mirar con detenimiento los datos de contacto, y también el apartado del Área legal, o los Términos y Condiciones. Y no dejar de leer las preguntas frecuentes, así como verificar que tengan un servicio de atención al cliente en caso de reclamos.

 

Comprobar la conexión segura

Si se va a pagar con tarjeta de crédito, al momento de llegar al formulario la parte superior del navegador debe comenzar con HTTPS, que significa que es una página segura. Además, suele cambiar de color para distinguirla de una página común. En navegadores como Firefox o Chrome, se ve el icono de un candado que informa sobre el sitio web y el tipo de conexión utilizado.

 

No usar redes públicas

Hay que tratar de evitar las redes de conexión públicas, así como realizar la operación en un locutorio. Si se conecta con el wifi del hogar, se sugiere mantener la contraseña que viene de fábrica y utilizar un cortafuego.

 

En el móvil, usar aplicaciones

Muchas empresas cuentan con aplicaciones para móviles y tabletas que permiten realizar el proceso de compra en forma segura. Por ello, se sugiere descargarla y proceder desde esta aplicación, y no desde el navegador del móvil.

 

Tener métodos seguros de pago

Si no se cuenta con tarjeta de crédito, PayPal ofrece una forma rápida y segura de realizar compras o transferir dinero. Si se usa una tarjeta, hay que verificar que tenga el correspondiente número CVV en la parte trasera, y muchos bancos ofrecen la opción de enviar un SMS para confirmar el proceso.

 

Cuidado con los mails

Tras realizar una compra, la empresa enviará por correo electrónico la factura, información sobre la entrega del producto y quizás algunas promociones. Pero nunca solicitará un cambio de contraseña o ingresar la información de la tarjeta de crédito. En caso de problemas, lo que se debe hacer es ingresar al portal de la empresa y acceder a la zona de clientes, usando el nombre de usuario y contraseña registrado.

 

Llevar un control de las compras

Todas las facturas y recibos que envíen desde la empresa hay que descargarlos, guardarlos, y por qué no, también imprimirlos. Esa es la garantía en caso de problemas y es lo que servirá para cualquier tipo de reclamación. Y de paso, también sirve para tener un control preciso de los gastos que se vayan realizando.

Economía Digital

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