Los ‘prejubilables’ de Iberia, contra Pastor

Temen perder parte de la indemnización por la mediación de la ministra

“¿Yo? Firmaría y me iría. Estoy harto de esta compañía, de los directivos y de algunos compañeros”.

La conversación con un piloto de Iberia al borde de la jubilación –que prefiere mantener el anonimato– transpira sentimientos encontrados entre el amor a su profesión y el incipiente odio que crece hacia su casa durante más de una década.

Pero lo que de este testimonio se recoge no es más que la verbalización del malestar que crece en un grupo concreto de profesionales. Los prejubilables de Iberia.

Indemnizaciones

Temen que las indemnizaciones planteadas en un primer momento por International Airlines Group (IAG), la matriz de Iberia y British Airways, continúen menguando.

Iberia se comprometió a organizar la reducción de su personal en torno a un expediente de regulación (ERE) que alcanza la cifra de los 4.000 empleados.

El número de despidos se modulará según un plan de jubilaciones anticipadas y otras salidas voluntarias. Es el acuerdo de mínimos firmado por la dirección española y los sindicatos.

Las trabas de Pastor

El colectivo espera firmar por el 60% del salario hasta cobrar la jubilación. Sus compañeros se marcharon antes de la fusión con el 80%. Pero la Ministra de Fomento, Ana Pastor (PP), y los sindicatos se podrían interponer.

No voluntariamente, sino forzando la máquina tanto como para que IAG opte por despedir y pagar los 20 días de la reforma laboral.

Aludiría las millonarias pérdidas (260 millones) de la aerolínea española, como recoge la ley del Partido Popular.

Consejo extraordinario

La posibilidad crece a medida que se acerca el 1 de febrero. El viernes, el consejo de administración volverá a reunirse para dar luz verde al pacto entre compañía y sindicatos.

Los consejeros están divididos en dos bandos claros, que responden a las dos nacionalidades de la empresa: la española y la británica.

Los afines al consejero delegado, Willie Walsh, temen que el pacto global no garantice la viabilidad. Los representantes de los accionistas españoles cierran filas con el presidente Antonio Vázquez y defienden el acuerdo de mínimos.

¿Amenazas?

El bando ibérico de IAG ha pedido a Pastor que presione para que Walsh acepte el pacto y no materialice la propuesta inicial de 4.000 despidos.

El máximo dirigente de la matriz entiende que adquirió un compromiso con los inversores derivado de un plan votado por unanimidad en noviembre.

Esas conversaciones al más alto nivel han puesto en alerta a los trabajadores, que ven peligrar la indemnización por salida voluntaria. Llegan informaciones hasta la plantilla de que algunos episodios podrían interpretarse como amenazas en Londres.

Fotocopias

Los correos electrónicos circulan por Iberia y las fotocopias denunciando la extraña mediación aparecen en los tablones de anuncios de algunos aeropuertos.

Con ellas además se tantea la creación de una asociación de prejubilables que defienda los intereses de esta parte del colectivo mientras dure el conflicto.

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