Altea: uno de los pueblos más bonitos de España, según National Geographic
Este pueblo de la provincia de Alicante es perfecto para tener en tu radar antes de que se convierta en un destino masificado, ¡y es que lo merece!

El pueblo de Altea en Alicante. Foto: Comunitat Valenciana
Altea, un pequeño pueblo costero en la provincia de Alicante, ha sido reconocido por la prestigiosa revista National Geographic como uno de los pueblos más bonitos de España. Y no es difícil entender por qué. Este encantador rincón mediterráneo es un refugio de paz y belleza que combina tradición, historia y paisajes de ensueño. Con sus casas blancas, sus callejones empedrados y sus vistas al mar, Altea se ha convertido en un destino obligado para quienes buscan un lugar especial en la Costa Blanca.
Qué ver en Altea
Una de las principales atracciones de este pueblo de Alicante es su casco antiguo, que te transporta en el tiempo con sus calles serpenteantes y casas encaladas adornadas con flores. Este laberinto de callejuelas estrechas, muchas de ellas empinadas, está lleno de encanto. Mientras paseas por el barrio de El Fornet, puedes disfrutar de una rica variedad de detalles como balcones con flores, pequeñas tiendas de artesanía y restaurantes con vistas impresionantes al mar.
Uno de los puntos más emblemáticos de Altea es la Iglesia de Nuestra Señora del Consuelo, que se alza majestuosa en la parte más alta del pueblo. Conocida por sus distintivas cúpulas de tejas azules y blancas, esta iglesia es una de las imágenes más reconocidas de la Costa Blanca. Desde su plaza, se puede disfrutar de una de las mejores vistas de la bahía de Altea y del Mediterráneo.
El paseo marítimo de Altea es otro de sus encantos. A lo largo de este paseo se encuentran diversos bares y restaurantes que ofrecen desde tapas hasta platos de mariscos frescos. Aquí, el sonido relajante de las olas acompañará cualquier comida o café, mientras disfrutas de las vistas a la bahía de Altea, enmarcada por el impresionante Peñón de Ifach en Calpe, al fondo.
Además, la Torre de la Galera y la Torre de Bellaguarda son monumentos históricos que aún permanecen en pie, recordando la importancia defensiva de este pueblo en siglos pasados. Estas torres son miradores naturales desde los que puedes apreciar la belleza natural que rodea a Altea, desde las Sierra de Aitana y Sierra de Bèrnia hasta el mar.
Si lo que buscas es naturaleza, este pueblo de Alicante también es un punto de partida ideal para rutas de senderismo, especialmente por la cercana Sierra de Bèrnia, desde donde se obtienen espectaculares panorámicas de la costa y del interior montañoso de Alicante.
¿Por qué es uno de los pueblos más bonitos de España?
Lo que hace de Altea un lugar especial no solo son sus encantadores rincones históricos, sino también su ambiente relajado, la cercanía con la naturaleza y su ubicación privilegiada junto al Mediterráneo. Altea ha logrado preservar su autenticidad a lo largo de los años. Aunque ha evolucionado desde sus raíces como pueblo pesquero, aún conserva ese aire tradicional que lo distingue de otros destinos más turísticos de la Costa Blanca.
Otro de los grandes atractivos de Altea es su escena artística. A lo largo de los años, el pueblo ha atraído a numerosos artistas, que se han establecido aquí debido a la tranquilidad y la inspiración que ofrece el entorno. Esta afluencia artística ha dado lugar a galerías de arte, talleres y tiendas donde puedes encontrar piezas únicas de artistas locales. Cada año se celebra en el pueblo el Festival de Altea, donde se puede disfrutar de música, teatro y arte, un evento cultural que refuerza la identidad creativa de esta localidad.
El turismo en Altea no es masivo, lo que permite a los visitantes disfrutar de sus calles sin aglomeraciones y con la sensación de haber descubierto un lugar secreto. La fusión entre el mar, las montañas y el casco antiguo crea una atmósfera única que enamora a quien lo visita.
Cómo llegar a Altea
Altea está muy bien conectada con las principales ciudades de la Comunidad Valenciana. Si vienes desde Alicante, se encuentra a unos 50 kilómetros de distancia y es fácilmente accesible en coche por la autopista AP-7 o la carretera N-332. También hay servicios de tren y autobús que conectan Altea con Alicante y otras ciudades de la región. Desde Valencia, la distancia es de unos 130 kilómetros, lo que hace de Altea una opción ideal para una escapada de fin de semana.
Si viajas en avión, el aeropuerto más cercano es el aeropuerto de Alicante-Elche, a unos 70 kilómetros, desde donde puedes tomar un coche de alquiler o un transporte público para llegar al pueblo.
Altea es, sin duda, un destino que merece ser explorado. Su combinación de belleza natural, patrimonio histórico y ambiente artístico lo convierten en un lugar especial, perfecto para una escapada relajada y auténtica. La magia de sus calles empedradas, sus miradores que ofrecen vistas espectaculares al Mediterráneo, y su rica oferta cultural y gastronómica, hacen de Altea un pueblo inolvidable, digno de su reconocimiento como uno de los más bonitos de España.