Quién es Oswald Aulestia, el mayor falsificador de arte del mundo

Se lo conocía como ‘el Maradona de los pinceles’. Buscado por el FBI y la policía española, sus cuadros eran tan perfectos que desconcertaban a los peritos. Estamos hablando de Oswald Aulestia, señalado como el mayor falsificador del mundo, y su increíble vida y carrera se podrá conocer en un documental.

Oswald. El falsificador se estrenará el 30 de septiembre en Filmin y varios cines de España, en una producción dirigida por Kike Maíllo que revelará cómo hizo “este barcelonés carismático, irreverente y provocador” para colocar sus obras en numerosas galerías de arte, colecciones privadas y algunas “de las pinacotecas más importantes del mundo”.

Se buscan ladrones de guantes blancos

El FBI lo tuvo en la mira por estar en el centro de una trama internacional con sede en Barcelona y ramificaciones en EEUU, Canadá, Australia, Japón y varios países de Europa; que involucraba a marchantes y galeristas de renombre.

Mailló dijo que tras los encuentros con Oswald Aulestia era difícil saber qué era verdad y qué mentira de sus historias

Maíllo dijo que dio con el personaje tras rodar Cosmética del enemigo, con la idea de hacer una película de timadores y ladrones de guantes blancos.

Dio con la historia de Aulestia por la prensa y le sedujo que un hombre tan talentoso para el arte y con mil formas de esquivar la justicia pueda ser su vecino en Barcelona.

La seducción del timador

El cineasta pudo encontrar al falsificador, quien le contó su vida pero donde le fue difícil saber qué es realidad y cuánto hay de mentira.

“Oswald es un seductor, un embaucador, un narrador nato. Ha desarrollado su vida personal y profesional en base a ese talento. Es la ‘mediterraneidad’ hecha persona”, describió Maíllo.

A lo largo del documental, filmado como si fuera un thriller, el realizador comprobó que el arte no se restringe al estilo y la temática, sino que necesita una buena historia a la hora de vender una pieza. “Y es algo que el propio Oswald aplica a su propia biografía”.

“Oswald es un seductor, un embaucador, un narrador nato. Es la mediterraneidad hecha persona”.

Kike Maíllo

Maíllo y el equipo de producción reconocen que les ha costado ver al personaje en perspectiva. El falsificador “es un seductor nato” y con la increíble vida que ha protagonizado “era fácil perder el foco y la objetividad”.

Esquivando la justicia de España y EEUU

En el documental se ve cómo Oswald fue detenido tres veces. En la primera ocasión fue absuelto porque los peritos no pudieron demostrar que los cuadros eran falsificaciones, y en la segunda, a pesar de la colaboración entre los Mossos d’Esquadra y el FBI, también esquivó la cárcel.

En la tercera sí fue extraditado a EEUU, donde pasó 11 meses en prisión; pero que para el pintor fue “lo mejor que le ha pasado en la vida. Para él fue estar como en un convento, con un silencio en el que no tiene que estar convenciendo a los demás de cosas”, precisó Maíllo en una entrevista con Europa Press.

La película alcanza niveles surrealistas cuando Oswald se para frente a la Fundación Tàpies y crea una obra muy similar a la del artista catalán solo usando barro y un cartón encontrado en la basura.

A pesar de los millones que ha recaudado con sus obras, el director puntualizó que la etiqueta del ‘mayor falsificador del mundo’ es por el volumen de cuadros realizados más que por el dinero que ganó. “Él trabaja con un mercado mucho más asequible, de litografías y grabados que podían vender a 500 o 600 euros”, precisó.

Y su tuvo tanto éxito, es porque “todo el mundo quiere tener un Picasso en su pared”, dijo Maíllo.