La llama de ‘The Crown’ no se apaga: así será la precuela sobre los Windsor

A falta de dos temporadas para finalizar ‘The Crown’, Netflix negocia ya una millonaria precuela que cubriría desde la muerte de la reina Victoria a la boda de Isabel y su ascensión a monarca

La precuela cubriría los primeros 50 años del siglo XX en la Casa Windsor. Foto: Netflix.

En proceso de posproducción la quinta temporada de The Crown, que podremos ver en Netflix a partir de noviembre, y aún sin saber hasta qué momento histórico cubrirá la sexta y última entrega –que podría incluir o no a Kate Middleton– pero que parece restringirse a principios de los 2000 con la adolescencia y juventud de los príncipes William y Harry (Willian y Kate se casaron en 2011), se perfila una continuación de la exitosa saga real aunque, en este caso, en forma de precuela.

Mientras los Windsor miran con recelo los próximos capítulos de la serie, su creador, Peter Morgan, estaría ya diseñando una mirada al pasado, concretamente desde la muerte de la reina Victoria en 1901 y hasta el punto en el que comenzó la actual The Crown, la boda entre la princesa Isabel y Felipe Mountbatten en 1947.

Cubriría así un periodo muy convulso de la historia, con fuertes transformaciones y agitaciones, incluidas las dos guerras mundiales y una pandemia, la de la mal llamada gripe española, pero también hitos como el acceso de la mujer al voto y sucesos como el hundimiento del Titanic.

Antes de ‘The Crown’: 4 reyes en 50 años

Según adelantaba el diario británico The Daily Mail, los planes para esta serie, producida por Left Bank Pictures y Sony Pictures Television, están avanzados y, puesto que cada temporada de la actual serie cubre unos 10 años de la historia, la precuela tendría 5 temporadas.

En este periodo se suceden hasta 4 monarcas británicos. Foto: Netflix.

“Esto es un poco como Star Wars, donde la oportunidad es extender la franquicia sumergiéndose en la historia”, señalaba una fuente citada por el diario.

La precuela, dividida en 5 temporadas, cubriría desde la muerte de la reina Victoria en 1901 hasta la boda en 1947 entre la princesa Isabel y Felipe Mountbatten

De momento Morgan habría comenzado a escribir esquemas de guion y se estarían haciendo planes para filmar.

También se supone que, al igual que en el formato actual, los actores que dan vida a los personajes cambiarán (actualmente cada dos temporadas) para reflejar el paso del tiempo y la madurez.

Lo que no faltará, desde luego, es material. En los 50 años que abarca el periodo que se abordaría hay muchísimas historias que llevar a la pantalla.

El príncipe Eduardo hizo temblar los cimientos de la Casa Windsor con su abdicación. Foto: Netflix.

Por ejemplo, 4 reyes -Eduardo VII, Eduardo VIII, Jorge V y Jorge VI- y 14 primeros ministros, así como escándalos que pusieron en entredicho a la Familia Real, como la abdicación de Eduardo VIII para casarse con la estadounidense Wallis Simpson o el propio cambio de nombre de la dinastía, antes Casa de Sajonia-Coburgo y Gotha en 1917.

Una serie de 500 millones de libras

Aún sin título, la precuela, con una inversión estimada de 500 millones de libras (597 millones de euros) arrancaría en 1901 con la ascensión al trono de Eduardo VII tras la muerte de la reina Victoria y su reinado de 63 años.

A cambio, su sucesor solo estuvo 10 años en el trono, aunque si vio los Juegos Olímpicos de Londres de 1908, los cuartos en la nueva era del olimpismo tras los de Atenas, París y San Luis.

Su segundo hijo, Jorge, accedió a la Corona como Jorge V (su hermano mayor, Alberto, había muerto antes que su padre). La ostentaría hasta 1936 y en su reinado, marcado por la Primera Guerra Mundial, el ascenso de movimientos como el socialismo, el comunismo y el fascismo, el republicanismo irlandés o el movimiento de independencia de la India, cambió el nombre oficial de la Casa Real por el de Windsor, como respuesta al sentimiento anti-alemán generado por la Gran Guerra.

Claire Foy y Matt Smith dan vida a Isabel y Felipe en las primeras temporadas de ‘The Crown’. Foto: Netflix.

Ya hemos visto a Eduardo VIII (encarnado por Alex Jennings y Derek Jacobi) y a Jorge VI (Jared Harris) en la actual serie de The Crown, este último representando el papel de padre de la que sería la reina Isabel, junto a su yerno Felipe o en sus últimos días (murió el 20 de enero de 1936). Muy jugosa es la historia de cómo Jorge, venciendo problemas de tartamudez y timidez extrema, llegó a ser un rey muy popular, un relato que ya llevó al cine Tom Hooper en la cinta El discurso del rey (2010) protagonizada por Colin Firth.

Seguramente también se ahondará en el fugaz paréntesis de Eduardo VIII, cuya intención de contraer matrimonio con la dos veces divorciada Wallis Simpson lo obligó a abdicar el mismo año de su acceso al trono en favor de su hermano Jorge VI (y que luego en la actual The Crown es una suerte de faro para su sobrino-nieto Carlos, el Príncipe de Gales, que se identifica con él).

La decisión sería a la postre determinante para la princesa Isabel, que se convirtió en heredera al trono.

a.
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