Un largo paseo por Roma a través del cine

La belleza de sus monumentos, el encanto de sus calles y la gran cantidad de sitios históricos de Roma fueron escenarios clave de incontables películas. Recordamos algunas de ellas

Imagen de ‘Vacaciones en Roma’, con Hepburn y Peck en la Plaza España

Es inevitable: cuando se piensa en una película que muestre Roma, inmediatamente se llega a la escena de Anita Ekberg bailando en las aguas de la Fontana di Trevi, en La dolce vita.

Pero hay cientos de películas más que usaron a la capital de Italia como escenario. Y no hablamos de las recreaciones de la Roma antigua de Gladiator u otras producciones similares, sino de filmes que aprovecharon plazas, calles, grandes monumentos y rincones desconocidos para ambientar sus historias.

El Coliseo en el cine

A cada paso que los cinéfilos den por la ciudad van a identificar algún sitio. Empecemos con el icono de la ciudad, el Coliseo, que aparece en Un americano en Roma de Steno, un clásico de la comedia italiana.

Es un enfoque más divertido que el que le da Bernardo Bertolucci en El conformista, cinta de 1970 donde las ruinas de la antigua arena es clave en la escena final.

Steno, Bertolucci, Sordi y Fellini usaron al Coliseo como escenario de sus películas

También cabe recordar a Alberto Sordi en Nando Mericoni cuando, en lo alto de los arcos del Coliseo, amenazaba con lanzarse al vacío si no viajaba a Kansas.

Otras cintas en las que aparece este lugar donde se martirizaron personas y animales es Operación U.N.C.L.E. de Guy Ritchie, Satiricón de Federico Fellini, La Grande Bellezza de Paolo Sorrentino y Todo el dinero del mundo, de Riddley Scott.

Por la plaza del Campidoglio

La plaza del Campidoglio, que por el abandono en la Edad Media era conocido como el Monte Caprino, es donde el amigo del Andréi Gorchakov se quita la vida en Nostalghia, de Andreij Tarkovskij.

Allí se puede ver el Palacio de los Conservadores, que atesora un buen número de estatuas antiguas, que Jane Campion eligió para acompañar a Nicole Kidman en una dura revelación en Retrato de una dama.

Matt Damon y Cate Blanchet paseando por Roma en ‘El talento de Mr. Ripley’

En Roma de la mano de Mr. Ripley       

Muchos rincones de Roma parecen detenidos en el tiempo, por ello no es muy difícil disfrazar a la ciudad como si no hubiera progresado desde otros siglos.

Por ello el director Anthony Minghella uso varias localizaciones para ambientar el espíritu de los años ’50 en El talento de Mr. Ripley, como las plazas Mattei y Navona, el St. Regis Gran Hotel, la Fontana de la Tartaruta (tortuga), el castillo de Sant Angelo, la Ópera y Plaza España.

Esta última plaza, famosa por sus escalinatas que conducen a la iglesia de Trinità dei Monti, también aparece en Come, reza, ama de Ryan Murphy, Una mujer y tres hombres de Ettore Scola, en la irónica Zoolander, donde parodia los desfiles de moda; y en De Roma con amor, de Woody Allen.

Roma según Woody Allen

Esta película –en la línea de Medianoche en París y Vicky Cristina Barcelona es un paseo fílmico-turístico por la ciudad.

Otros escenarios que aparecen en ella son la Fontana di Trevi (guiño obvio a Fellini), las calles del Trastevere, la Villa Borghese, el Campo de Fiori, la elegante Via Veneto, el auditorio Parco de la Música (diseñado por Renzo Piano) y las plazas del Popolo, Navona y Venecia, donde está el policía que da la bienvenida a la película.

El monumento a Víctor Manuel II, escenario de varias películas italianas e internacionales. Foto Turismo de Roma

El monumento a Víctor Manuel II

En esta plaza está el gigantesco monumento a Víctor Manuel II, que el humor romano bautizó como ‘la máquina de escribir’, y que es una localización clave de El vientre del arquitecto de Peter Greenway.

Las reflexiones metafísicas de ‘El vientre del arquitecto’, de Peter Greenway giran en torno al monumento de Víctor Manuel II

Menos filosófica y más convencional, este monumento se derrumba en la olvidable El núcleo de Jon Amiel, en medio de una catástrofe geológica.

En Roma con Gregory Peck y Audrey Hepburn

El Circo Máximo es donde transcurre la escena final de Palombella Rossa, de Nani Moretti, donde se ve a un sol de cartón piedra que surge desde el monte Aventino.

Y no se puede terminar este recorrido sin recordar a una de las películas que mejor retratan a la ciudad eterna, que es Vacaciones en Roma de William Wyler, donde Gregory Peck y Audrey Hepburn pasean con una Vespa por sitios como el Coliseo, la Plaza de San Pedro, el Foro Romano, el Panteón, la vía del Foro Imperial y la Boca de la Verdad.

En ese gigantesco medallón lleno de leyendas, en el pórtico de Santa Maria in Cosmedin, Peck le gasta una broma a Hepburn. La escena es tan inolvidable como es pasear por Roma.

a.
Ahora en portada