Magic Hoteles dona 400.000 raciones de comida tras reducir un 75% el desperdicio alimentario
El desperdicio alimentario pasa de 300 gramos a 70 tras implantar un sistema de medición
Piscina infinita de Magic Villa España
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Magic Hoteles ha unido solidaridad y ahorro de costes a través de mejoras en el proceso de gestión en los seis millones de servicios de comida al año que realiza la cadena hotelera. A través de un sistema propio de medición, ha logrado que el desperdicio medio de comidas que tienen sus hoteles pase de 300 gramos de media por cliente y servicio a 70 gramos. Parte del ahorro generado con este control de costes se ha convertido en comidas que se sirven en Uganda. El resultado: 400.000 raciones de comida repartidas en una de las zonas más pobres de África.
El hotel Magic Cristal Park fue el pionero en esta medida. Hace dos años empezó a pesar cada uno de los productos que entraba y salía de la cocina para tener el registro exacto de qué tipo de alimento se convertía en desperdicio. A partir de ahí, se empezaron a aplicar medidas para evitar pérdidas de manera que se pasó de una media 300 gramos de comida tirada a la basura a 70 gramos, lo que supone una reducción de más del 75%.
El programa piloto se ha ido implantando en toda la cadena, tanto en los hoteles de Benidorm y la provincia de Alicante como los ubicados en Gandía y en Oropesa del Mar, donde la compañía ha relanzado como Magic World el antiguo complejo de Marina d’Or. Todavía no hay un balance global de los ahorros conseguidos ya que hay instalaciones en las que el sistema no tiene aún un año de antigüedad.
En términos generales y a falta de contabilizar el efecto en todas las instalaciones, según explica el vicepresidente de Magic Hoteles, Javier García Cuenca, el ahorro en costes se sitúa en el 5%. «Esto supone muchos cientos de miles de euros«, asegura tras una presentación a medios de comunicación realizada en el hotel Villa España de Benidorm, una de las reformas más expectaculares realizadas en la zona.
Este ahorro, en parte, mejora la sostenibilidad financiera de la compañía mientras parte de ese ahorro se convierte en donaciones de comidas en una alianza con la ONG Rafiki África, que es la que directamente distribuye las casi 400.000 raciones que ha donado la cadena hotelera.
Juan Amirola, presidente de Rafiki, ha explicado que están «en una de las zonas más pobres de Uganda, que ya es uno de los países más pobres de Africa, en casas sin luz, agua ni suelo y donde sólo comen una pasta de maiz. Allí las niñas quedan embarazadas a los 11 años y casadas a los 12″.
Además de las comidas que reparten a una población que antes de la llegada de esta ONG tenía a un 80% de la población que no comia carne ningún día del año, Rafiki ofrece «microcréditos» en las que se ofrecen «semillas, cabras, gallinas». «Se han dado cuenta que si vacunas a las gallinas a los ocho días tienen huevos y ahora todos quieren tener huevos».
Entre las características diferenciales de esta ONG es que no tienen gastos generales y toda la donación de Magic Hoteles revierte en la población africana. La cadena hotelera, además, está llegando a acuerdos con organizaciones locales para que el reparto de las comidas repercuta también en sus zonas de actuación.
Javier García Cuenca, que reconoció con orgullo que existen otras cadenas hoteleras punteras «como Ilunion o RH», sugirió al resto del sector hotelero copiar su control de desperdicio como mecanismo para la sostenibilidad y de reparto hacia los más desfavorecidos. De hecho, está en fase de estudios nuevos mecanismos de control de costes en gastos como el agua y la energía con el fin de reducidir costes y convertir parte de este ahorro en donaciones.
