El hombre fuerte de Barclays en España, nuevo consejero delegado de la Sareb

Belén Romana, propone el nombramiento de Jaime Echegoyen y crea tres nuevas direcciones

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La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) tiene nuevo consejero delegado. Se trata de Jaime Echegoyen, licenciado en derecho por la Complutense y, desde este domingo, el encargado de reconducir la crisis interna que azota al banco malo.

En esta nueva etapa en la que la entidad quiere “potenciar la gestión de su cartera”, la llegada de Echegoyen reforzará la captación de inversores internacionales. El nuevo consejero delegado dejó hace unas semanas su cargo al frente de Barclays España y asume el reto de reforzar la cúpula directiva.

Nueva direcciones

Pero el nombramiento del nuevo primer ejecutivo no ha sido la única novedad anunciada. El organismo ha aprovechado para llevar a cabo una reestructuración organizativa. En concreto, la Sareb ha creado una dirección comercial que se encargará de gestionar la totalidad de las desinversiones –de activos financieros o inmobiliarios–. Al frente de la división se situará el hasta ahora director de activos inmobiliarios, Juan Barba.

Asimismo, el banco malo ha diseñado la nueva dirección de reestructuraciones y recuperaciones que dirigirá Enrique Sainz. Éste último es economista y se incorpora a la Sareb tras su paso por Banesto.

Recursos corporativos

Pero no son los únicos cambios anunciados este domingo. La entidad también ha revelado que desde ahora contará con dos nuevas áreas: una de patrimonio, que dirigirá Olga Guitián, y otra de estrategia, que asumirá Iker Beraza. Ambos ya formaban parte del equipo de Sareb, una como directora de control interno y el otro, como director de análisis macro.

Por último, la entidad ha creado la dirección de recursos corporativos que integrará las direcciones de medios y de operaciones. El responsable de la nueva sección será Alfredo Guitart.

Baile de sillas

Los cambios en el organismo responden a una necesidad de encauzar la misión del banco malo. El primer terremoto de la Sareb se produjo tras la salida de Miguel Garicano, el primero en presentar su renuncia como director general ante la presidenta del organismo público, Belén Romana. El pasado 29 de enero, Walter de Luna siguió los pasos de su antecesor y también abandonó el cargo.

Romana ha propuesto a Echegoyen ante el consejo de administración y ha destacado que la incorporación del nuevo primer ejecutivo contribuirá con su “experiencia y su amplia visión del sector financiero a que la sociedad afronte con éxito los retos del futuro”.

Los retos de Sareb

La Sareb ha ingresado más de 3.800 millones de euros y ha amortizado 2.000 millones de deuda en 2013. Pero a las diferencias entre los miembros del núcleo duro del organismo se han sumado las críticas que ha recibido por la gestión de los activos.

Sin ir más lejos, la Comisión Europea (CE) y el Banco Central Europeo (BCE) han llamado la atención del organismo. En su último informe, ambas instituciones destacaban que el banco malo se enfrentaba a “retos importantes”. Las críticas radican del precio con el que el organismo firma las transacciones y el ritmo de ventas de activos.

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