España fue el mayor importador mundial de gas ruso por barco en verano

La UE ha sido la destinataria de al menos el 54% del total de exportaciones energéticas de Rusia en los seis primeros meses de guerra

Un metanero

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España lideró las importaciones mundiales de gas natural licuado (GNL) procedentes de Rusia durante los meses de julio y agosto de 2022, según el informe ‘Financiando la guerra de Putin’ publicado este martes por el Centro para la Investigación sobre Aire y Energía Limpios (CREA, por sus siglas en inglés). 

En concreto, España importó GNL por un importe de 747 millones de euros. El segundo lugar lo ocupa Francia, con 600 millones de euros; el tercero China, con 527 millones y el cuarto Bélgica con 392 millones, según recoge Europa Press. 

Sin embargo, las importaciones del gas que llegan por barco son las únicas en las que destaca España, en el caso del petróleo, del carbón o del gas vía gasoducto, nuestro país no figura entre los 10 principales importadores.  

Las exportaciones energéticas financian casi la mitad del coste de la guerra 

CREA concluye que «los combustibles fósiles continúan llenando el cofre de guerra del Kremlin, debido a los altos precios», a pesar de que los volúmenes vendidos han descendido. Según sus cálculos, en los primeros seis meses de guerra, Rusia ha ingresado 158.000 millones de euros gracias a sus exportaciones de energía.  

De esa cantidad, al menos 43.000 millones de euros habrían ido directamente a parar a las arcas públicas rusas, en comparación con el coste estimado de 100.000 millones de euros de la guerra en Ucrania. 

Alemania lidera las exportaciones energéticas 

Del total de exportaciones, la UE ha sido destino de al menos el 54%, equivalente a 85.000 millones de euros. Por países, Alemania se sitúa como el principal destino, con 19.000 millones, seguida de Países Bajos (11.100 millones), Italia (8.600 millones), Polonia (7.400 millones), Francia (5.500 millones), Bulgaria (5.200 millones) y Bélgica (4.500 millones). Las importaciones totales de España de todos los tipos de combustibles desde que empezó la guerra alcanzan los 3.300 millones de euros. 

Por tipo de combustible, el petróleo ha sido el principal producto de exportación ruso desde que empezó la guerra, con 76.000 millones de euros, mientras que el gas natural se situó en 35.000 millones; los derivados del crudo, en 26.000 millones; el carbón; 13.000 millones; y el gas natural licuado, en 9.000 millones. 

Ante estos datos, el CREA ha subrayado que «para solucionar los ingresos caídos del cielo a corto plazo de Rusia provocados por los altos precios de los combustibles fósiles, hacen falta aranceles o límites de precios” y ha incidido en que existe una necesidad “especial” de “desacoplar los precios de importación del gas de Rusia de los precios internos del gas de Europa». 

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