El Gobierno de España también cobra la paga extra: gasta un millón de euros en nuevos ordenadores para los diputados
La obsolescencia de estos equipos dificulta la implantación de nuevos servicios y la incorporación de personal
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, interviene durante una sesión plenaria en el Congreso de los Diputados. EUROPA PRESS
El Congreso de los Diputados ha puesto en marcha un nuevo proceso de renovación tecnológica que supondrá la adquisición de 850 ordenadores de sobremesa y servicios asociados por un valor estimado de 970.645 euros, según el anuncio de licitación publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el 1 de julio de 2025.
La inversión, que se acerca al millón de euros, coincide con el inicio del verano, aunque en este caso el gasto responde a la necesidad de actualizar equipos que, en muchos casos, superan los nueve años de antigüedad y ya no cumplen los requisitos mínimos de seguridad y eficiencia estipulados.
El pliego de prescripciones técnicas, al que ha tenido acceso este medio, detalla que los 700 ordenadores actualmente en uso en el Congreso tienen una antigüedad superior a los nueve años, y los monitores asociados, más de doce años.
Esta situación genera dificultades para la actualización de los sistemas operativos y las aplicaciones, incrementa el riesgo de averías y, sobre todo, expone a la Cámara Baja a vulnerabilidades de seguridad informática.
La obsolescencia de estos equipos dificulta la implantación de nuevos servicios y la incorporación de personal, por lo que se ha considerado imprescindible su sustitución.
Características técnicas de los nuevos equipos
La licitación exige que los nuevos ordenadores sean de gama profesional y cumplan estrictos requisitos de eficiencia energética y sostenibilidad ambiental, en línea con la normativa europea.
Todos los equipos deberán ser compatibles con Windows 11 Pro (64 bits) y contar con componentes de última generación: procesadores Intel Core Ultra de segunda serie o equivalentes, 16 GB de memoria RAM DDR5, discos duros SSD de 512 GB, conectividad avanzada (WiFi 6, Bluetooth 5.3, Ethernet gigabit), y sistemas de gestión remota y seguridad (TPM 2.0, BIOS propietaria, bloqueo de puertos, etc.).
En cuanto a los monitores, se opta por pantallas LED IPS de entre 23,8 y 24,5 pulgadas, con resolución Full HD, altavoces y cámara integrada, y certificaciones medioambientales EPEAT Silver.
El teclado deberá contar con lector de tarjetas criptográficas para el uso del DNIe, y el ratón será óptico, ambos conectados por USB. Los equipos deberán contar con una garantía de cinco años “in situ” y soporte técnico con respuesta al siguiente día laborable.
Sostenibilidad y reciclaje
La renovación tecnológica también contempla la retirada y gestión responsable de los equipos antiguos.
La empresa adjudicataria deberá hacerse cargo, sin coste adicional para el Congreso, de la retirada de hasta 700 ordenadores y monitores, asegurando su reutilización, reciclaje o destrucción conforme a la normativa vigente sobre residuos electrónicos.
Se exigirá la entrega de certificados que acrediten el destino final de los dispositivos, en cumplimiento del Real Decreto 110/20152.
Un proceso recurrente
No es la primera vez que el Congreso realiza una inversión de este tipo. En 2016, la Cámara Baja gastó más de 827.000 euros en la adquisición de 699 ordenadores y 490 tabletas iPad para los diputados y funcionarios.
En 2021, se renovaron 758 ordenadores de sobremesa y 58 portátiles por más de 600.000 euros, justificando la operación por la obsolescencia de los equipos y la imposibilidad de actualizarlos a los nuevos sistemas operativos y requisitos de seguridad.
Estos procesos de renovación suelen generar debate público sobre el coste y la oportunidad del gasto, pero los expertos en tecnología y seguridad informática insisten en la necesidad de mantener actualizados los equipos de una institución clave como el Congreso, tanto por eficiencia como por protección frente a ciberataques.
Inversiones similares
En 2023, la Cámara destinó 1,23 millones de euros a la compra de 825 móviles de alta gama para los diputados, sustituyendo terminales que ya tenían seis años de uso.
Estas inversiones, son habituales en grandes organizaciones públicas y privadas que requieren garantizar la operatividad, la seguridad y la confidencialidad de la información.
El contrato prevé la entrega escalonada de los equipos en un plazo máximo de 120 días, con formación básica para el personal técnico y la obligación de atender nuevas necesidades derivadas de la incorporación de personal o la implantación de nuevos servicios.