Retamar de la Huerta, el desarrollo estrella de Alcorcón, despega con la luz verde definitiva

El desarrollo cuenta con 3.503 viviendas proyectadas y una inversión en infraestructuras que supera los 15 millones de euros

Retamar de la Huerta, uno de los desarrollos urbanísticos más ambiciosos del suroeste madrileño, ha recibido el impulso definitivo para convertirse en una realidad. El Ayuntamiento de Alcorcón ha aprobado en un Pleno Extraordinario el Proyecto de Urbanización de este enclave, marcando así un antes y un después en la evolución residencial de la Comunidad de Madrid.

Con 3.503 viviendas proyectadas y una inversión en infraestructuras que supera los 15 millones de euros, Retamar se posiciona como un nuevo referente de urbanismo sostenible, conectado y a escala humana.

El presidente de la Junta de Compensación de Retamar de la Huerta, Darío Rivera, no oculta su satisfacción tras el anuncio: “Esta aprobación representa un hito en el desarrollo de Retamar, tras años de trabajo conjunto, y supone el paso definitivo hacia su puesta en marcha”.

No se trata solo de construir casas, sino de edificar «un nuevo modelo de barrio, un espacio que combine naturaleza, habitabilidad y conectividad, alineado con las demandas del siglo XXI», explican desde la Junta de Compensación.

El corazón del proyecto late al ritmo de una filosofía que apuesta por el equilibrio entre ciudad y entorno natural. Retamar no solo añadirá más de 3.500 viviendas al mercado inmobiliario madrileño, sino que lo hará integrando más de 30 hectáreas de zonas verdes en su trazado urbano.

Su diseño prioriza la escala humana, la accesibilidad y la sostenibilidad, convirtiéndose en una propuesta que, más que responder al crecimiento demográfico, lo hace al deseo creciente de calidad de vida.

Pero Retamar no quiere ser una isla en el extrarradio. El desarrollo estará plenamente conectado con el tejido urbano de Alcorcón y sus alrededores. Para ello, el Plan Especial de Infraestructuras (PEI), aprobado el pasado marzo, contempla una reordenación completa de los accesos por carretera.

La actuación más destacada es la transformación de la M-506, que será soterrada parcialmente bajo una nueva glorieta, ampliada a tres carriles por sentido y equipada con vías de servicio para mejorar la fluidez del tráfico. A ello se suma una pasarela peatonal sobre la M-50, que facilitará la movilidad peatonal en una zona hasta ahora inaccesible para viandantes.

Estas actuaciones no solo pretenden mejorar el tráfico, sino asegurar que Retamar de la Huerta esté integrado funcional y emocionalmente con su entorno.
“Queremos que Retamar no sea un desarrollo aislado, sino parte viva del tejido metropolitano de Madrid. Conectado, verde, moderno, pero sobre todo habitable”, apuntan desde el equipo promotor.

Retamar de la Huerta se sitúa al noroeste de Alcorcón, en una ubicación estratégica que combina proximidad a la capital con una apuesta clara por el bienestar.

Su diseño urbano no oculta su ambición: ser un nuevo modelo de crecimiento donde lo natural no quede relegado a los márgenes, sino que se sitúe en el centro del proyecto.

Retamar de la Huerta, cuenta atrás para su comienzo

Con esta aprobación definitiva, arranca la cuenta atrás para que las máquinas comiencen a dibujar sobre el terreno lo que hasta ahora era solo una idea. Una idea que se ha consolidado en papel, planos y normativa, y que pronto dará forma a un nuevo barrio. Uno que aspira a convertirse, más que en un simple conjunto de viviendas, en una comunidad habitable, verde y bien conectada.

En plena efervescencia del debate sobre la vivienda, Retamar de la Huerta ofrece una respuesta tangible: un desarrollo planificado, sostenible y con vocación de futuro. A tan solo unos kilómetros de la capital, pero con el horizonte despejado hacia una nueva forma de entender la ciudad.

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