BBVA admite a la SEC riesgo de que no salga la opa a Sabadell tras la intervención del Gobierno

BBVA admite que si se impusieran determinadas condiciones podrían reducirse los beneficios estimados o que no se pudiera completar la operación

Archivo – El presidente del BBVA, Carlos Torres.

BBVA admite ante el regulador del mercado de Estados Unidos, la SEC, el riesgo de que la opa sobre Sabadell no salga adelante, en su comunicado informando sobre la decisión del Ministerio de Economía de elevar al Consejo de Ministros la autorización de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) a la operación.

El banco presidido por Carlos Torres informó el pasado martes tanto a la CNMV como a la SEC sobre la decisión del Ministerio dirigido por Carlos Cuerpo, indicando que el Consejo de Ministros «tendrá el plazo máximo de un mes para resolver de conformidad con lo previsto en la mencionada ley».

El contenido del breve comunicado a los reguladores español y estadounidense del BBVA es idéntico, pero en el de la SEC la entidad financiera añade dos párrafos (‘Important information for investors‘).

Sede del banco presidido por Carlos Torres en Madrid.

En ese añadido publicado en la SEC, el banco español insta en primer lugar a los inversores y titulares de acciones a leer la documentación sobre la opa presentada ante el regulador del mercado estadounidense.

Después, BBVA añade un párrafo de ‘Declaraciones prospectivas’.

La entidad indica que el hecho de que no existan términos en sus comunicaciones como ‘podría’, ‘potencialmente’, ‘proyectar’… no significa que las declaraciones no sean prospectivas, es decir, basadas en expectativas que, si bien «se consideran razonables en el momento en el que BBVA y su equipo directivo las realizan, son inherentemente inciertas».

Torres anunció el martes, el mismo día de la decisión de Economía, una inversión de 4.570 millones en México

«Por ejemplo», dice BBVA, las condiciones de las aprobaciones gubernamentales «que podrían reducir los beneficios anticipados de la transacción o causar que BBVA no pueda completar la transacción (…)».

El banco español añade otros riesgos, como los relacionados con efectos adversos sobre el precio de la acción, la capacidad para retener clientes y personal clave u otros problemas que pueden dar como resultado «que una compañía combinada no opere tan efectiva y eficientemente como se esperaba».

«Todos estos factores», termina diciendo BBVA, «son difíciles de predecir» y escapan a su control.

El regulador del mercado estadounidense exige a las compañías cotizadas la publicación de sus operaciones con elevada transparencia, y las empresas incluyen en sus comunicados una exhaustiva lista de riesgos que evita posibles demandas de inversores.

El rechazo declarado por parte del Gobierno español a una fusión entre BBVA y Sabadell -la operación con la que culminaría la opa después de que esta hubiera sido aprobada por los accionistas del banco catalán-, así como el incremento del valor de la acción de la entidad presidida por Josep Oliu, hacen dudar cada vez a más analistas sobre el éxito de la oferta.

El martes, tras el anuncio de la decisión del Ministerio de Economía, fuentes de BBVA reafirmaron que la operación «es buena para el interés general de Cataluña, España y Europa».

La unión con Sabadell, aseguraron las mismas fuentes, «es un proyecto de crecimiento que permitirá a la entidad combinada aumentar su capacidad de financiación a empresas y hogares en 5.000 millones de euros adicionales al año«.

Y el mismo día 27 de mayo Carlos Torres anunció en México una inversión de unos 4.570 millones de euros en el país hasta 2030, como informó este diario.

«No solo es inversión. Es confianza, es visión de largo plazo. Es compromiso con los más de 30 millones de clientes a quienes servimos en el país», manifestó Torres en la reunión anual de consejeros regionales del banco en México.

El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, y el consejero delegado, César González-Bueno, en una imagen de archivo.

La apuesta de BBVA por México -el mercado en el que el banco español logra sus mayores ingresos y beneficios- ha sido precisamente utilizada por el presidente y el consejero delegado de Banco Sabadell para oponerse a la opa.

«El accionista del Sabadell tiene que saber que canjea su riesgo España por un riesgo mezclado de otros países, y que asume una posible pérdida de capital ante posibles devaluaciones que vayan ocurriendo en esos países», alertó Josep Oliu en un encuentro con medios de comunicación celebrado este año, previo a la junta de accionistas de la entidad.

El pasado mes de septiembre César González-Bueno también se refirió a la dependencia de México de BBVA. El consejero delegado del Sabadell advirtió que la acción del banco presidido por Carlos Torres se resiente cuando cae el valor de mercado de los bancos mexicanos.

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