Lindt abre su primera boutique en Andorra y refuerza su expansión internacional

Lindt continúa reforzando su presencia internacional con la apertura de su primera boutique en Andorra. El nuevo establecimiento, de 48 metros cuadrados, está ubicado en Avinguda Meritxell 43, uno de los puntos más emblemáticos y concurridos del país, reconocido por su fuerte atractivo turístico.

La inauguración llega justo antes del inicio de la campaña navideña, una de las épocas clave para la compañía suiza, que busca acercar sus productos a los consumidores en destinos de alto tránsito y con una sólida tradición comercial.

32 tiendas en la Península Ibérica

Con esta apertura, Lindt & Sprüngli alcanza las 32 tiendas propias en la Península Ibérica. La red comercial de la firma se distribuye entre 12 en la Comunidad de Madrid, seis en Barcelona, tres en el País Vasco, dos en Málaga, dos en Oporto, dos en Lisboa, una en Mallorca, una en Valencia, una en Granada, una en A Coruña y ahora una en Andorra.

Esta expansión consolida la apuesta de la compañía por el mercado ibérico, donde ha experimentado un crecimiento sostenido durante los últimos años.

Un espacio diseñado para el disfrute

La directora de retail de Lindt & Sprüngli en Iberia, Ana Martínez, ha destacado la importancia de esta nueva apertura:

“Nos hace muchísima ilusión abrir las puertas de nuestra primera tienda en Andorra. Con este nuevo espacio, seguimos apostando por ofrecer una experiencia única, donde los amantes del chocolate podrán disfrutar de todas nuestras innovaciones y donde, por primera vez, contamos con una planta superior con una zona diseñada por y para el disfrute y el descanso”, ha señalado.

La boutique combina el diseño característico de la marca con nuevos elementos pensados para ofrecer una experiencia sensorial completa.

Experiencia y variedad para los amantes del chocolate

El nuevo establecimiento ofrece diferentes zonas temáticas para disfrutar de la amplia gama de productos de la chocolatera suiza. Entre ellas, destaca la Lindt Pick & Mix, que permite personalizar el surtido de bombones con nuevos sabores, y el Chocolate Bar, un espacio versátil con fuentes de chocolate y bebidas elaboradas al momento.

De esta forma, la compañía refuerza su objetivo de crear experiencias inmersivas y premium que conecten con los consumidores más allá del producto.