Telefónica pone fecha al estreno de su fibra más potente
Los usuarios disfrutarán de conexiones simétricas de hasta 10 Gbps, acercando España a la élite mundial en conectividad residencial
Telefónica recibe una multa millonaria
Telefónica, la principal operadora de telecomunicaciones en España, ha anunciado la fecha para uno de los lanzamientos más esperados de los últimos años, la activación de su red de fibra óptica XGS-PON, que permitirá velocidades de hasta 10 Gbps en los hogares españoles.
La modernización llegará a finales de noviembre de 2025, lo que puede significar un antes y un después en la oferta de banda ancha fija a nivel nacional.
La llegada de la tecnología XGS-PON supone un salto de calidad. Si hasta ahora la mayoría de conexiones Movistar y de otros operadores basados en la red de Telefónica funcionaban sobre tecnología GPON, con velocidades máximas de 1 Gbps, ahora se abre la puerta a velocidades diez veces superiores.
Con XGS-PON, los usuarios disfrutarán de conexiones simétricas de hasta 10 Gbps, acercando España a la élite mundial en conectividad residencial.
¿Qué implica para el usuario?
Para navegar a estas velocidades se requerirá un nuevo router compatible, que ya han anunciado con soporte para WiFi 7, encaminando el hogar hacia el entorno “gigabit”.
La experiencia de usuario mejorará tanto para el streaming 8K y gaming sin latencia, como para entornos laborales digitales. Si bien el despliegue será progresivo, Movistar prevé ofertar las primeras tarifas de 2 Gbps, escalando pronto a máximos superiores.
Este movimiento se suma a la tendencia general del mercado, pues otros operadores como Digi u Orange han iniciado despliegues selectivos de XGS-PON, aunque Telefónica cuenta con la mayor huella de fibra del país.
Telefónica: tarifas, cobertura y el adiós al cobre
El desembarco de la nueva fibra no llega en solitario. En paralelo, Telefónica culmina en 2025 el cierre de su red de cobre, un hito que la convierte en pionera europea en la migración total a fibra óptica.
Para los menos del 4% de clientes que aún no cuentan con cobertura FTTH, se ofrecen soluciones vía radio de alta velocidad, garantizando la digitalización universal.
Además, el regulador ha dado un paso importante, a partir de febrero de 2026, Telefónica dejará de estar obligada a compartir a precio regulado su red de fibra con otras operadoras, tras 26 años de regulación.
Esto otorga a Movistar mayor libertad comercial para competir en tarifas y servicios exclusivos, aunque continúa la obligación de alquilar sus canales físicos de despliegue (MARCo) a los rivales, de modo que el resto de actores (MasOrange, Digi, Vodafone, etc.) mantendrán acceso a la base de infraestructuras.
En cuanto a precios, la competencia es muy alta, Movistar comercializa fibra de 300 Mbps por 15 euros y 1 Gbps por 25 euros mensuales aproximadamente, ajustándose a un mercado en el que Orange y Digi responden con ofertas similares o más agresivas, especialmente para líneas adicionales y segundas residencias.
España, líder europeo en despliegue y desafíos futuros
A cierre de junio de 2025, España superó los 18,9 millones de líneas de banda ancha fija activa, y se estima que la cobertura de fibra óptica supera ya el 99% de los hogares.
Telefónica lidera el despliegue, con una red que alcanza más de 30 millones de unidades inmobiliarias y con proyectos como el nuevo cable submarino PENCAN-X para conectar Canarias con la Península
El avance del XGS-PON asegura que España siga a la vanguardia europea en digitalización, pero también plantea nuevos retos.
Los operadores alternativos demandan garantías de acceso a recursos físicos y ajustes en los precios mayoristas, la CNMC estudia subir en torno a un 20% las tarifas de acceso a conductos, en aras de que la competencia no se resienta.
Por otra parte, la sociedad conjunta Fiberpass, impulsada por Telefónica y Vodafone, promete cubrir inicialmente 3,6 millones de inmuebles con fibra de última generación, enfocada especialmente en pymes y digitalización empresarial.
La consolidación de la nueva red, la llegada de nuevas ofertas de valor y la liberalización del mercado marcan el camino del sector para los próximos años.