La Xunta da la razón a Stellantis y carga contra la «cacicada» del Gobierno por la fábrica de baterías

El presidente de la Xunta mueve ficha tras las declaraciones del consejero delegado de Stellantis, Carlos Tavares, en las que censuraba la falta de comunicación con el Gobierno central. Alberto Núñez Feijóo ha aprovechado la rueda de prensa posterior al Consello semanal del Ejecutivo gallego para advertir que «España se encuentra en una situación crítica» con un sector como el de la automoción, clave en el tejido industrial.

«No puedo estar más de acuerdo», ha recalcado Feijóo tras ser preguntado por las palabras de Tavares en las que advertía de que España puede «perder lo que ha conseguido en los últimos veinte o treinta años» en el sector de la automoción. «Si las cosas no van rápido, el trabajo de los últimos veinte o treinta años corre el riesgo de perderse porque las cosas van muy, muy, muy rápido», aseguraba Tavares, que censuraba en su misma intervención que «España no es uno de los Estados europeos que se ha movido rápido».

El máximo ejecutivo de Stellantis (consorcio con planta en Vigo), argumentaba que «el plan de recuperación europeo está ayudando a España y Stellantis está bastante abierto a discutirlo con el gobierno español», pero criticaba que, «por el momento, no hemos sido solicitados por el gobierno«.

Las críticas de Feijóo

«No deberíamos jugar con este sector. Es determinante», ha alertado Feijóo, que ha añadido que «si cayese el sector de la automoción, Galicia tendría un problema económico de primer nivel», toda vez que la planta de Balaídos se sitúa líder en producción de automóviles tras fabricar casi medio millón de unidades en 2021 pese a la crisis de los microchips.

En este sentido, Feijóo ha lamentado la falta de concreción por parte del Gobierno en torno al Perte del automóvil y ha atacado al Ejecutivo central por haber asignado el proyecto de fábrica de baterías a Cataluña. Según el presidente de la Xunta, «no se han puesto en contacto con Stellantis para una fábrica de baterías», motivo por el cual ve una «enorme discriminación y cacicada» en el anuncio de esta factoría.

A vueltas con la electrificación de los vehículos

Además, el presidente gallego ha expresado su oposición a los nuevos objetivos de reducción de emisiones que marcadas a los fabricantes de automóviles. «Que se imponga desde la política un sistema único con un plazo único que ponga en cuestión a toda la industria española, siendo esta la segunda de Europa en ensamblaje es una decisión política que no hemos compartido nunca. Es sorprendente que desde la política se le diga al panadero cómo se hace el pan«, ha recalcado.

«Que en el momento en el que vende menos coches por la crisis de los semiconductores se le diga al sector tiene que hacer la mayor inversión es algo difícil de admitir», ha explicado el presidente de la Xunta sobre los planes en la Unión Europea para la electrificación de la gama de vehículos.