Reino Unido ‘mima’ a Navantia para reducir al «mínimo» los retrasos de su macrocontrato
La secretaria de Estado de Adquisiciones de Defensa de Reino Unido ha avanzado que la construcción del primero de los tres buques del programa FSS arrancará ya en este 2025 y asegura que la compra de Harland & Wolff por parte de Navantia proporciona "mayor certeza" sobre la ejecución del contrato

Ricardo Domínguez, presidente de Navantia / Navantia
Reino Unido mantiene la hoja de ruta con el macrocontrato de Navantia pese a la operación para el rescate de su socia Harland & Wolff. Maria Eagle, secretaria de Estado de Adquisiciones de Defensa de Reino Unido, ha avanzado durante una intervención en la Cámara de los Comunes, que el encargo saldrá adelante con «cambios mínimos».
«Tras la administración y adquisición de Harland & Wolff, el Gobierno ha colaborado estrechamente con Navantia UK en el futuro del programa FSS y ha acordado con ella los cambios mínimos necesarios en el contrato, en términos comerciales, para garantizar la continuidad del programa con la menor demora posible», ha explicado Eagle en respuesta al diputado conservador James Cartlidge.
Durante su intervención, la representante del Gobierno británico asegura que este programa dotado inicialmente de un presupuesto por valor de 1.600 millones de libras (unos 1.900 millones de euros al cambio actual) se «mantiene como una prioridad».
«La reciente adquisición de Harland & Wolff por Navantia UK tras la quiebra de Harland & Wolff ha proporcionado mayor certeza a la entrega del programa FSS y protege la capacidad de construcción naval del Reino Unido», ha defendido Eagle. En este sentido, la secretaria de Estado de Adquisiciones de Defensa del Reino Unido celebra el movimiento de Navantia al entender que se trata de una inversión que permitirá modernizar el astillero de Belfast (que juega un papel clave en este contrato).
Además, la representante del Gobierno británico reitera la previsión de arrancar ya en este 2025 los trabajos de construcción del primero de estos tres buques de aprovisionamiento. La intención que los otros dos pasen a estar operativos también a lo largo de esta década.
El plan de Navantia UK
Los administradores de Navantia UK ya daban cuenta en la memoria anual de 2024 de la firma de una enmienda al contrato de construcción naval FSS para el Ministerio de Defensa Británico para formalizar el encargo de los tres buques. “Ese compromiso implica aumentar el precio del contrato del programa FSS y retrasar la fecha de entrega para realizar las actualizaciones necesarias para cumplir con la nueva fecha de entrega acordada”, explicaban.
La filial británica de Navantia acometió el año pasado una ampliación de capital de 75 millones de libras, casi 90 millones de euros al cambio, que fue suscrita por su matriz. La firma también encargó a KPMG la valoración de Harland & Wolff (empresa conocida por encargarse de la construcción del icónico Titanic y, además, recalcaba en su informe que “se ha establecido una línea de crédito para proporcionar el apoyo financiero necesario para la adquisición y las operaciones posteriores de los negocios recién adquiridos”.
De esta manera, Navantia y el Gobierno británico cierran filas para minimizar el impacto de la quiebra de Harland & Wolff en el macrocontrato que estas dos firmas se adjudicaron en enero de 2023 formando un consorcio (el Team Resolute) junto a BMT.
El plan inicial establecía que siete de los 21 bloques que compondrán estas embarcaciones se producirán en Puerto Real, mientras que las 14 restantes correrán a cargo de los astilleros de Appledore (Inglaterra) y Belfast (Irlanda del Norte). En este último se llevarán a cabo los trabajos finales de ensamblaje y la integración de los sistemas de los buques.