El Gobierno arranca la ‘Plataforma para la Acción de Sevilla’ con conversión de deuda en inversiones
España ha anunciado un desembolso inicial de 3 millones de euros en la iniciativa que ha presentad junto al Banco Mundial
El ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, durante un pleno en el Senado. Ricardo Rubio / Europa Press
El Gobierno ha lanzado este martes la ‘Plataforma para la Acción de Sevilla’, un nuevo marco multilateral que arranca con dos grandes iniciativas para transformar el tratamiento de la deuda externa en países en desarrollo.
La primera es el ‘Global Hub for Debt Swaps for Development’, una plataforma global para facilitar la conversión de deuda en inversiones sociales y climáticas. El hub, coliderado por España y el Banco Mundial, busca que los países más vulnerables puedan reinvertir los pagos de deuda en sectores como salud, educación, seguridad alimentaria o adaptación al cambio climático.
Para su puesta en marcha, España ha comprometido una contribución inicial de 3 millones de euros y ha abierto la participación a agencias multilaterales, donantes y organizaciones de la sociedad civil.
«El objetivo es ofrecer herramientas prácticas que hagan las conversiones de deuda más simples, rápidas y accesibles», ha explicado el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo. España tiene una experiencia relevante en este campo: ha firmado 47 acuerdos con 28 países, condonando 1.645 millones de euros en dos décadas.
El Banco Mundial será la entidad anfitriona del fondo fiduciario que financiará la asistencia técnica a gobiernos. Casos como el de Costa de Marfil, donde los ahorros derivados de un canje han servido para construir más de 30 escuelas, ilustran el potencial transformador de estos mecanismos.
«Queremos escalar lo que ofrece resultados reales»ha señalado el presidente del Banco Mundial, Ajay Banga.
Aplazamiento de pagos
Paralelamente, se ha anunciado la ‘Alianza por las Cláusulas de Suspensión de Deuda’, una coalición internacional destinada a incluir cláusulas que permitan aplazar los pagos de deuda en situaciones de emergencia, como desastres naturales o crisis sanitarias.
Estas cláusulas proporcionan liquidez inmediata a los países afectados, sin comprometer su solvencia ni el gasto social. Desde abril de 2024, España las ha incorporado en todas sus nuevas operaciones financieras con países en desarrollo, ampliando su aplicación también a crisis alimentarias y a países de renta media-baja.
La Alianza ha sido respaldada por organismos como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y el Banco Africano de Desarrollo, así como por los gobiernos de Francia, Canadá, Reino Unido y Barbados. Su objetivo es desarrollar un lenguaje contractual común y principios compartidos que fomenten la adopción de estas cláusulas a escala global.
«La lógica es simple, pero poderosa: dar espacio fiscal cuando más se necesita», ha subrayado Carlos Cuerpo. Según el BID, este tipo de cláusulas ya ha permitido ofrecer protección financiera por valor de 3.200 millones de dólares en países de América Latina y el Caribe.
La Plataforma para la Acción de Sevilla, presentada en el marco de la IV Conferencia Internacional sobre Financiación para el Desarrollo, busca transformar la arquitectura financiera internacional mediante instrumentos innovadores. El Consejo de Ministros ha autorizado además un nuevo marco que permitirá a España firmar acuerdos bilaterales de conversión de deuda por hasta 300 millones de euros en los próximos cinco años.