Rajoy y Puigdemont se caen bien y nada más
La reunión entre ambos presidentes se salda sin acuerdo, pero en un marco de recuperación de la "cordialidad"
Mariano Rajoy y Carles Puigdemont han conseguido reunirse por fin. Se han encontrado este miércoles en La Moncloa y se han dado cuenta de que no hay ninguna posibilidad para llegar a un acuerdo, pero también han visto que han recuperado la «cordialidad» que se perdió en los tiempos de Artur Mas. Puigdemont ha pedido un referendo. Rajoy ha contestado: «Juntos ganamos todos».
Puigdemont se ha presentado en Madrid con una larga lista de reivindicaciones. El presidente ha exhibido una lista de 46 peticiones muy variadas de tipo social, sobre la invasión de competencias, de tipo financiero o respecto las interferencias del Gobierno central en la gestión del Ejecutivo catalán. Es una lista nueva, que se ha duplicado en los últimos años. En 2014, Mas realizó una petición parecida, pero su listado de agravios sólo tenía 23 puntos.
Dos puntos innegociables
Ambos presidentes son conscientes de que las posibilidades de acuerdo son mínimas. Pero Puigdemont cre que, al menos, puede haber «diálogo constante» sobre 44 de esos 46 puntos. Un diálogo que Rajoy y el presidente de la Generalitat han encomendado a sus vicepresidentes: Soraya Sáenz de Santamaría y Oriol Junqueras, respectivamente.
Los otros dos asuntos son mucho más peliagudos y Puigdemont se ha mostrado convencido, tras dos horas de conversación, de que Rajoy jamás cederá en esos dos puntos. Se trata de la celebración de un referéndum independentista en Cataluña acordado entre la Generalitat y el Estado y de la «desjudicialización de la política».
Judicialización de la política
Puigdemont considera que es un «grave error» que Mas, Irene Rigau y Joana Ortega están imputados por haber promovido la celebración de un referendo alternativo el 90 de noviembre de 2014. «Perseguir ideas a golpe de juzgado es una enorme equivocación», ha sentenciado el presidente catalán.
«Sin ley no hay democracia», le ha contestado Rajoy, quien no se ha salido del guion que viene siguiendo desde que la política catalana inició su proceso independentista. «Juntos ganamos todos», ha reiterado el presidente en funciones, que ha dejado muy claro que mientras su partido esté al frente del Gobierno español «no habrá consulta» independentista en Cataluña.