La forma de interactuar con el móvil puede revelar trastornos mentales

Un estudio en el que participa Apple incrementa la capacidad de los teléfonos móviles para predecir si un usuario sufre de deterioro cognitivo

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La última investigación en la que ha participado Apple revela que no todas las personas interactúan igual con sus smartphones. Aclaración: los investigadores de la compañía de la manzana no hablan de adictos al teléfono móvil, sino de cómo se relacionan con su dispositivo las personas que sufren algún tipo de trastorno cognitivo.

Para ello, la tecnológica de Cupertino monitorizó los teléfonos de 113 adultos de entre 60 y 75 años durante 12 semanas. Del total, 31 personas presentaban un diagnóstico de deterioro de sus facultades mentales, mientras que las 82 restantes estaban sanas. 

Cada sesión del estudio abarcaba desde el momento en que los sujetos desbloqueaban sus teléfonos y hasta que los volvían a bloquear. El resultado registrado por los investigadores también incluye las aplicaciones utilizadas para clasificar las sesiones en diferentes tipos con el objetivo de desarrollar un modelo basado en aprendizaje automático, una de las tecnologías que participa de la inteligencia artificial y que consiste en «enseñar» a las máquinas. 

De esta forma el sistema fue capaz de distinguir entre usuarios con problemas cognitivos en alrededor de un 80% del tiempo de estudio, y reveló que el contexto, la frecuencia, el tiempo de uso y la combinación de apps a lo largo de distintas sesiones guarda relación —más allá de la casualidad— con el estado cognitivo, ya conocido, de los participantes.

La importancia del estudio reside en que el sistema pueda conseguir finalmente una mayor y más rápida predicción de los trastornos mentales. Según los datos empleados en el estudio, entre un 15% y un 20% de las personas mayores de 65 años sufre algún tipo de deterioro —por lo general, leve— que afecta principalmente a la memoria o a las habilidades, además de aumentar el riesgo de padecer enfermedades como el alzhéimer

Aunque Apple no pretende por el momento desarrollar ningún tipo de app para incorporar en su sistema operativo, sí que planea realizar más estudios de este tipo con el objetivo de recopilar estadísticas y, en un futuro, poder plasmar los resultados en alguno de sus productos. 

Móviles que detectan la depresión

Otro estudio de la Universidad de Stanford, cerca de la sede de Apple en California, permitió identificar a través de técnicas de inteligencia artificial -reconocimiento facial y lenguaje natural- los síntomas de la depresión, una enfermedad que según la Organización Mundial de la Salud acumula 300 millones de víctimas en todo el mundo. 

La eficacia del sistema desarrollado por los investigadores estadounidenses fue del 80%, lo que ha propiciado que se pueda implementar en el futuro de los smartphones. 

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