El mito de Marisol revive en Madrid

Niña prodigio en los años 60, varias generaciones de españoles vieron crecer en las pantallas a Pepa Flores, Marisol, con películas como Un rayo de luz, Ha llegado un ángel, Tómbola o Cabriola, que rodó bajo dirección de Mel Ferrer. Aunque retirada del cine y la vida pública desde 1985 (ni siquiera recogió el Goya de Honor que le entregaron en 2020), pocas imágenes son tan populares en el imaginario colectivo como las suyas, que ahora la Academia de Cine recupera en una exposición que puede verse en Madrid.

Abierta hasta el próximo 2 de septiembre en la sede de la Academia (Zurbano, 3), de acceso libre y gratuito, la muestra recoge un total de 39 instantáneas realizadas por César Lucas, el fotógrafo que más la retrató, entre los años 1963 y 1973, precisamente la década tras la que Pepa Flores alcanzó la categoría de mito nacional.

Marisol, imágenes nunca vistas

Se trata de un nuevo homenajea Pepa Flores tras el que se realizó en los Premios Goya de 2020, una exposición que muestra “el resplandor del que sigue siendo uno de los rostros fundamentales de la historia del cine español”, apunta el presidente de la Academia de Cine, Fernando Méndez-Leite, que destaca “los millones de personas que han crecido disfrutando de las películas y canciones de Marisol”.

La comisaria de la muestra, la ganadora del Goya a Mejor Maquillaje y Peluquería Sylvie Imbert, tuvo carta blanca para bucear entre los negativos de César Lucas, el fotógrafo que más veces tuvo a Pepa Flores en el objetivo.

“Algunos de los negativos tienen más de 55 años, muchos de ellos no fueron publicados en prensa. Cuando entré en casa de César y vi lo que tenía… daría para varias exposiciones” ha revelado en el acto de presentación de la exposición.

Imbert destaca especialmente la “mirada de Marisol”, que atrapa en todas las fotografías.

También la estética contemporánea en las imágenes que, a su juicio, “podrían ser de una publicación de moda de hoy en día”.

El resplandor de un mito

Con el nombre de Marisol, el resplandor de un mito, la muestra se hace eco de un proyecto de 2018, cuando algunas de las fotografías seleccionadas por Imbert pudieron verse en La Térmica de Málaga y dos años después en la muestra callejera que la Academia montó en la misma ciudad con motivo de la concesión del Goya de Honor 2020.

Ya entonces la idea era que viajara a Madrid, pero la pandemia lo ha retrasado hasta ahora.

La Academia de Cine quiere sea esta exposición sobre Marisol sea punto de inicio de un ciclo sobre los goyas honoríficos

Las 39 fotografías corresponden a reportajes para revistas de moda, portadas de discos, posados de viajes o de rodajes, algunas de ellas no publicadas en su día, que ilustran el magnetismo de Marisol y su evolución desde los 15 a poco más de 25 de años.

“Hay fotos que en su día no tenían valor y el tiempo se lo ha dado y viceversa”, ha señalado César Lucas, autor también de la foto de Marisol desnuda que se convirtió en un icono de la Transición y que no forma parte de esta muestra.

El fotógrafo, que tenía entonces una agencia de fotos, destaca la relación de colaboración y confianza con la artista. Ella era la más solicitada en esos años y él el fotógrafo que más veces la retrató.

“Aquí hay un resumen de ese trabajo muy continuo con Marisol, que era una de las personas más demandadas por las publicaciones. Yo le proponía hacer un posado de cierta manera y ella me decía qué quería hacer. Nos entendíamos y eso nos producía muy buenos resultados. Cada mes hacíamos uno o dos reportajes”, recuerda, mientras señala especialmente la foto que cierra la muestra, un autorretrato junto a Pepa Flores.

“Pido y deseo que quien las vea disfrute como yo cuando las hice”, añade Lucas para quien la categoría mítica que alcanzó Marisol en su día “no ha sido ocupada por nadie desde entonces”, lo que hace que su mito “siga vivo”.

Pepa Flores, con una densa y prolífica carrera concentrada entre los años 1960 y 1985, desde los primeros musicales como Tómbola y Un rayo de luz a su trabajo con directores norteamericanos como Mel Ferrer y sus películas con Juan Antonio Bardem, Jaime de Armiñán, Carlos Saura o Mario Camus, también ha dado su visto bueno para esta exposición, que la Academia quiere sea punto de inicio de un ciclo sobre los goyas honoríficos.