Reus: pistas para descubrirla (y saborearla)

Los tres grandes ingredientes de la capital del Baix Camp son Gaudí, el modernismo y el vermut; todo ello servido en cualquier orden

Reus es imprescindible para entender el Modernismo. Foto: Casa Navàs.

Fundada en 1150 y con una etimología de raíces celtas que significa cruce de caminos, la ciudad de Reus creció espectacularmente durante el siglo XVIII hasta convertirse en la segunda ciudad catalana. En esta época de auge, la capital del Baix Camp devino tercer centro comercial del aguardiente europeo (de aquí la famosa proclama de Reus-París-Londres) para pasar a ser la capital del vermut español durante el siglo XIX.

En esa ápoca Reus acogía consulados como los de Reino Unido, Países Bajos, Suecia, Dinamarca o Francia y se hizo famosa por ser cuna del general Prim, héroe de la batalla de los Castillejos en la guerra de África que encabezó la revolución que logró traer a España como rey a Amadeo de Saboya.

El vermut y Prim, pero también Gaudí (nacido en la vecina Riudoms, pero crecido en Reus), siguen siendo las marcas universales de una ciudad (106.000 habitantes), donde también vieron la luz Mariano Fortuny, Agustina de Aragón, Gabriel Ferrater o Lluís Pasqual.

Plaza del Mercadal, el corazón de Reus. Foto: Reus Promoció.

Reus, ciudad modernista

La siempre trepidante Reus posee un aeropuerto, ferias y dos teatros, y además de una rivalidad histórica, comparte con su vecina Tarragona (130.000 habitantes, y una superficie similar) dos grandes centros turísticos como son Port Aventura y Salou que por sí mismos ya justifican cualquier viaje.

Mientras Tarragona siempre ha sido un gran centro de cultura romana, Reus abrazó la arquitectura modernista y se convirtió en su segunda capital después de Barcelona, con una Ruta del Modernismo tras la huella de Gaudí, Doménech i Muntaner, Casellas y Rubió i Bellver, entre otros grandes arquitectos.

Tanto es así que muchos de los que van a Barcelona a impregnarse de Gaudí se desplazan también a Reus (108 km) por autopista, Renfe o AVE (Camp de Tarragona), para sorprenderse y disfrutar en el centro de interpretación Gaudí Centre Reus, de una gran experiencia High Tech, interactiva, audiovisual y sensorial, para saberlo todo sobre el “genio de Reus”.

Foto: Casa Navàs.

Además de sus tres grandes rutas (Ruta del Modernismo, Ruta Gaudí&Reus y Ruta del Vermut), la ciudad completa su oferta cultural con el Instituto Pere Mata, la Casa Navàs, el campanario de la iglesia de Sant Pere, el Palau Bofarull y la Estación Enológica Casa del Vermut y del Vino, sin olvidar el Paseo de la Boca de la Mina, una nueva ruta de 1.240 metros que lleva de la ciudad al Instituto Pere Mata y la primitiva mina de agua de Reus a través de construcciones, paisajes, fuentes y un jardín aromático.

La Ruta del Modernismo

Hasta 80 edificios forman parte de este espectacular recorrido entre los que se encuentran las casas Laguna y Carpa de Pere Casellas, la Casa Marco de Pere Domènech i Roura, las cuatro fincas de la calle Llovera, entre ellas la Casa Bartolí de José Subietas, las Casa Gasull y Casa Rull de Domènech i Montaner, y el singular Dispensario Antituberculoso de Joan Rubió, entre otros.

Institut Pere Mata, Pabellón de los Distinguidos. Foto: Reus Promoció.

El Instituto Pere Mata

Hospital psiquiátrico dividido en varios pabellones por usos, fue diseñado por Lluís Domènech i Montaner a finales del siglo XIX.

Se le considera, junto al Hospital de Sant Pau de Barcelona, como uno de los conjuntos hospitalarios del modernismo europeo, y un referente de la construcción de tipología sanitaria por sus instalaciones innovadoras y muy avanzadas para la época.

Institut Pere Mata. Infografía: Jordi Català.

Destaca por su belleza el Pabellón de los Distinguidos, para internos de familias acomodadas. Está catalogado como Bien Cultural de Interés Nacional.

Lluís Domènech i Montaner y el decorador Gaspar Homar diseñaron, con un presupuesto casi ilimitado, la fabulosa Casa Navàs

La Casa Navàs

Mansión-tienda en la plaza del Mercadal, la Casa Navàs fue también levantada entre el 1901 y el 1908 por el arquitecto Lluís Domènech i Montaner y el decorador Gaspar Homar, con un presupuesto casi ilimitado.

Casa Navàs. Infografía: Jordi Català.

Es uno de los mejores ejemplos de modernismo de Europa y surgió como encargo de una pareja de comerciantes muy adinerados. En Reus es imprescindible visitar este gran jardín de piedra, mosaico y artesanía, en el que destacan más de doscientos metros cuadrados (casi todo intacto) de vidrieras, mobiliario, y elementos decorativos de los mejores artistas y artesanos de la época.

La Estación Enológica, y la «Casa del Vermut y del Vino”,

Conjunto de edificios para investigación enológica de principios del siglo XX, con la tecnología más moderna de Europa, justo cuando se replantaban las viñas americanas tras la filoxera.

La escarela de caracol de la iglesia de Sant Pere que inspiró a Gaudí para la Sagrada Familia. Foto: Silvia Brenes.

Hoy es un espacio polivalente de información turística del en torno al vermut, con un montaje expositivo sobre el edificio, la historia del ‘Reus-París-Londres’ y el vermut de Reus. Además, se pueden catar vinos de las DOQ Priorat, DO Montsant, DO Terra Alta, DO Conca de Barberà, DO Tarragona y DO Catalunya.

Museo del Vermut

Otro edificio modernista alberga el primer Museo del Vermut del mundo con más de 6.000 artículos, 1800 botellas, 400 carteles, 3000 etiquetas y objetos de publicidad como ceniceros, vasos, chapas, documentos, cartas, postales, bandejas, etc. Además, incluye un popular restaurante.

Experimentando en Gaudii Experience.

La gastronomía de Reus

Además de disfrutar de un inolvidable vermut con todo su ritual en cualquier terraza y, muy especialmente, en las plazas del Mercadal, de Prim y de las Peixateries, Reus ofrece cocina mediterránea y productos locales históricos como la avellana, el aceite de oliva y el Menjar Blanc.

En la ciudad se puede escoger entre un número importante de restaurantes de referencia como L’Alkimista, Ferran Cerro, Le Bistrot, Myoos, El Museu del Vermut, Marieta, Xivarri y Vítric.

El famoso vermut de Reus. Infografía: Jordi Català.

Mención especial merece la antigua fábrica de Vermut Rofes, que presenta una amplia, original y sabrosa carta que une al hecho insólito de servir grandes vinos y espumosos a casi precio de mercado, y la rareza de aguas minerales de litro. Y todo ello rodeados de escenografía vermutera.

Un buen vermut en la histórica fábrica restaurante Rofes.

Un último consejo: en Reus hay grandes hoteles pero si pernocta y quiere despertarse en el corazón medieval de la ciudad con el tañido de las campanas y la belleza de la iglesia de Sant Pere, la proximidad de tesoros como la pastelería Padreny y la delicatesserie Cal Sendra no hay otra opción que alojarse en el novísimo Hotel Centre.

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