11 Nudos: arroces, carnes y pescados de aires atlánticos junto al Mediterráneo
La cocina gallega, pero también los vinos del norte y el jerez andaluz se encuentran en el restaurante 11 Nudos, que ofrece una de las mejores panorámicas del atardecer en Barcelona

Terraza del restaurante 11 Nudos
Muchas veces la gastronomía se presenta por clasificaciones geográficas: y así hablamos de la cocina catalana, vasca, francesa o asiática. Pues en el caso de 11 Nudos Terraza Nordés, su propuesta se presenta como atlántica. O si se trata de ser más precisos, “contemporánea con guiños gallegos”, dice a Tendenciashoy su directora María José González.
Pero quizás esa descripción se quede corta, porque revisando su carta se ve que además de los platos, también los cócteles y vinos son un viaje por diferentes regiones que miran al Atlántico.
El homenaje al mar de 11 Nudos
El restaurante, abierto desde enero en la cúpula del Centro Comercial Las Arenas (Gran Vía 373-375, Barcelona) es un homenaje al mar por donde se lo vea: un proyector que desfila imágenes de olas, barcas y faneadores de pesca; sillones en tonos azul y blanco, la terraza con un entramado de hojas que imitan a la de los eucaliptos, y los toques grises que recuerdan a los cielos nublados de las Rías Baixas.
El local está abierto todos los días, de 12:00 a 24:00 “con cocina non-stop” precisa González, o sea que sirven tanto para turistas de cenas tempranas como españoles amantes de comidas que se estiran hasta las tantas.
Pero si se puede elegir un horario, que sea a partir de las 20:00. A esa hora, un poco más tarde los meses que vienen, el sol comienza a esconderse por la sierra de Collserola, y desde la sala acristalada del 11 Nudos se ofrece uno de los espectáculos urbanos y naturales más bonitos que se pueden atrapar.
Los cócteles de bienvenida
En su amplia sala, con una capacidad de 200 comensales, se puede llegar al atardecer y entrar en clima con algunos de los cócteles de autor de la larga carta de bebidas del restaurante.
El restaurante ofrece cocina ‘non-stop’ desde las 12:00 a las 24:00, y los viernes y sábados un DJ anima las noches
Cabe recordar que el establecimiento, que pertenece al grupo Osborne, tiene a la ginebra gallega Nordés como el mascarón de proa de sus preparaciones; razón por la que comparte el nombre del restaurante. “11 Nudos también se refiere a los 11 botánicos que se usan para producir esta bebida”, puntualiza la directora.
Una de esas creaciones es el Nordesiño, con Nordés Gin, Montecillo Albariño, uva y tónica; cóctel liviano que abre el apetito; aunque también se puede empezar con algo más potente como los Combinados 11 Nudos, entre ellos el elaborado con brandy Carlos I, una de las alternativas a los de whisky, bourbon, ginebra y ron.
Galicia marca el norte
Ya que 11 Nudos está en un espacio comercial y gastronómico buscado por los residentes pero con una fuerte presencia del turismo, la carta apuesta por la variedad de platos, con la cocina gallega marcando el norte, y a un precio medio de 30 a 50 euros -depende de las bebidas-.
Entre las tapas, atención a las patatas marineras con sombrero de pulpo, así como a la empanadilla de mejillón con batea escabechado y pisto tradicional, o al brioche de caldeirada de moluscos.
Más sofisticada es la volandeira al horno con airea de Bloody Mary al brandy o el salteado de pulpo con cremosiño de patata, tradicional molusco que también se sirve a la brasa en piezas de 400 gramos.
Si hablamos de cocina marinera, no pueden faltar los arroces, como el de cigalas a la brasa o el clásico caldoso de bogavante.
O los pescados, entre el salmón a la parrilla sobre salteado de quinoa, los chipirones de anzuelo a la plancha, la corvina al horno con tartar de gambón o el lomo de bacalao con glaseado de su pil pil y arroz negro.
Carnes e ibéricos
Pero Galicia no es todo mar, también está la cocina de tierra adentro, como las carnes de vaca rubia gallega (como el entrecot de 300 gramos con patatas noissette) o la entraña con pak choi).
Y un peldaño superior, los productos Cinco Jotas de bellota 100% ibérico, desde la pluma a la parrilla al lomo de presa a la brasa o la parrillada de medio kilo de carne con patatitas y pimientos.
Este viaje por el norte se puede acompañar por la diversa carta de vinos, con DO no solo norteñas como Ribera Sacra, Bierzo, Valdeorras o Rías Baixas, sino también Rioja, Montsant, Rueda o Alella.
Para rematar, entre postres como la tarta de queso o el coulant de chocolate, especias y tierra de pistacho, se sugiere conocer algunos de los jereces, como el Fino viejísimo en Rama La Honda (11 años) o el Amontillado en Rama La Honda (22 años); bebida que fue la génesis del grupo Osborne, que nació hace 250 años en el gaditano Puerto de Santa María.