Un matrimonio entre estrellas y burbujas
Se necesitan, se tienen, se gustan y lo saben. Martín Berasategui, 12 estrellas Michelin, estrella lazos como embajador de un champagne Louis Roderer que vale la pena disfrutar

Si tiene la fortuna de disfrutar de una de las cuatro comidas que recordará toda su vida en el mítico restaurante Martín Berasategui de Lasarte-Oria, no deje de culminar la experiencia con alguno de los champagnes más importantes que se hayan elaborado: un Louis Roderer Non Vintage, Vintage o Cuvée de Prestige.
Entre estos se encuentran los míticos Roederer Cristal, el reconocido Brut Premie, premiado en 2013 y en 2017 como el mejor Champagne Non Vintage del Mundo, o el Cristal Rosé, recientemente considerado el mejor champagne del planeta en The Champagne & Sparkling Wine World Championships.
Una alianza en la cumbre
Berasategui ha confirmado su protagonismo como embajador absoluto de la exquisita marca francesa que ejerce desde el 2016, y que reinará en exclusiva en el restaurante-casa madre del cocinero vasco, aunque lo podrá encontrar en el resto de la constelación estrellada de sus restaurantes.
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Las razones de esta alianza de altura gastronómica se encuentran en el entendimiento exclusivo inter pares, las grandezas de uno y otro complementan el placer para los sentidos que generan.
La constelación que no parece que vaya a detenerse
Berasategui podrá brindar con las burbujas de la leyenda francesa por este panorama tan egregio que se extiende ante el chef español más laureado de la historia de la gastronomía, con 12 estrellas, entre la del Restaurante Ola del Hotel Tayko de Bilbao, y la del Fifty Seconds de Lisboa, además de las triples del Martín Berasategui de Lasarte-Oria y del Lasarte del Monument Hotel de Barcelona.
Los Louis Roderer Non Vintage, Vintage o Cuvée de Prestige son la mejor culminación para una comida en el Martín Berasategui de Lasarte-Oria
También hay que sumar dos del MB del Hotel Ritz-Carlton Abama en Tenerife, una en el restaurante Oria del Monument Hotel en Barcelona y otra en el restaurante Embe Be Garrote de San Sebastián.
El significado de Roeder
Louis Roederer produce champagne del más alto nivel en la capital de esta bebida espumosa, en Reims, Francia.
La empresa fue fundada inicialmente como Dubois Père & Fils en 1776, trece años antes de la Revolución Francesa y en un tiempo lleno de ebullición, en que las burbujas de la doble fermentación del champagne añadían un sentimiento de explosividad al que solo podía acceder una aristocracia que tenía hipotecado su papel en la historia.
El champagne en la Revolución Francesa
Hablar del rol del champagne durante la revolución es un tema apasionante pues es una bebida que jamás se dejó de producir, ni en los días convulsos de la guillotina.
Tanto es así que Napoleón Bonaparte, unos años después acuñaría su célebre frase: “¡Champagne! En la victoria lo mereces, en la derrota lo necesitas”.
El camino del éxito
La marca, que permanece hoy en día como una de las pocas maisons de champagne independientes y propiedad de una misma familia desde 1819, fue heredad de su tío por Louis Roederer en 1833, quien la rebautizó con el mismo nombre, y se puso en marcha para conquistar los mercados extranjeros.
Ni la caída en desgracia de los zares ni la Ley Seca frenaron la expansión de la marca por el mundo
A mediados del siglo XIX los vinos de Champagne Louis Roederer viajan hasta popularizarse en las mesas más acaudaladas de los Estados Unidos y San Petersburgo, donde alegran al zar Alejandro II.
El preferido de los zares
En pocas décadas, con una producción cercana a los tres millones de botellas, se convierte en una de las principales bodegas de Champagne.
El zar Nicolás II lo nombró proveedor oficial de la corte, aunque la revolución soviética complicaría su buena estrella; panorama que se complicaría años más tarde con la Ley Seca en EEUU.
Sin embargo, tanto en la clandestinidad de las salas de juego de Chicago y Nueva York, como en París entre los nobles y generales zaristas en el exilio, siguieron siendo fieles a este champagne que consumieron en grandes cantidades.
El impacto en el mundo
Desde 2006 Frédéric Rouzaud, que representa la sexta generación de la firma familiar, está al frente de esta explotación vitivinícola dirigida por grandes especialistas en vino, que cuenta con una superficie de 240 hectáreas de viñedos, compuestas exclusivamente por variedades Premiers y Grands Crus.
Su producción asciende a cerca 3,5 millones de botellas al año, de las cuales el 70-80% es Louis Roederer Brut Premier, que son distribuidas en más de 100 países.
Premios y más premios
La Maison Louis Roederer fue nombrada en 2019 como la casa de champagne más premiada en The Champagne & Sparkling Wine World Championships (CSWWC), conocidos como los ‘Oscars del champagne’. Había ganado nada menos que nueve medallas de oro.
Además sus Brut Vintage 2012 y Cristal Rosé Vinothèque 1995 fueron premiados como ‘World Champion’.
Considerada como la Maison de Champagne número uno por la Revue de Vin France, entre sus logros se encuentra que recibió míticos 100 puntos Parker y la única en repetirlo.