Ocho rutas para conocer Los Realejos bajo la Luna llena
Este fin de semana vuelven los Senderos de Luna Llena, diferentes rutas por los valles y pueblos de Tenerife bajo la tenue luz de la noche
Una forma diferente de conocer los encantos de Los Realejos. Foto Senderos de Luna Llena
Hay pocas imágenes más románticas del firmamento nocturno como las que presenta la Luna llena, un foco de luz blanquecina que ha inspirado a legiones artistas, que altera el ciclo de las mareas y que impulsa a demostrar la habilidad en la fotografía nocturna.
Cuando el satélite de la Tierra está en su plenitud (técnicamente, su superficie oscura brilla así porque está opuesto al Sol) también se convierte en un buen compañero de viajes, como lo promueven en Los Realejos con su propuesta de Senderos de Luna Llena.
La idea es realizar diferentes rutas por los hermosos paisajes de este municipio de Tenerife, donde el 50% de su superficie está protegida.
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Este festival de excursiones se realiza del 8 al 11 de septiembre, y además de promover las caminatas, busca impulsar los recursos históricos y culturales, sin olvidar de conectar al turismo con la gastronomía del norte de Tenerife.
Las rutas históricas
La primera de las rutas, el 8 de septiembre, es la de los Patios de los Realejos, un recorrido de baja intensidad que se inicia a las 21:00.
El punto de inicio es la calle El Medio de Arriba (en el Realejo Alto) y finaliza en la Casa de la Parra. Durante las 3 ½ horas los participantes conocerán la historia de esta localidad tinerfeña a través de los patios de diferentes casas históricas.
El día 9 habrá dos rutas. Una es El sendero de la costa, un itinerario de tres horas que se inicia en el barrio de Las Aguas, y recorre el antiguo camino real a través del bonito núcleo de El Rosario. Tras llegar al cauce del Barranco de Ruiz se pasa por la Rambla de San Antonio y finaliza en la Hacienda del Terrero, una antigua finca restaurada como un coqueto hotel rural.
Algunas rutas proponen ver el ‘museo volcánico al aire libre’ de Tenerife, y otra explora la historia a través de los patios de grandes casas
La otra es la de Senderismo en los Roques de García, un paseo de dificultad media a través de 4,87 km donde se puede ver un auténtico museo volcánico al aire libre, con la oportunidad de descubrir ejemplares de la flora endémica del parque como la retama, el codeso o el alhelí del Teide.
El paseo incluye un taller de astronomía, para conocer los secretos de la Luna que brilla y de los astros, así como de las leyendas y mitologías que surgieron en Canarias.
La naturaleza al alcance de la mano
Para el día 10 hay programadas tres rutas. La de Vilafor-El Paisaje Lunar es una intensa caminata de 6,5 horas y 13,3 km recorriendo parte del camino real de Chasna, la antigua vía de comunicación entre el norte y el sur de la isla. En el trayecto los visitantes atraviesan un pinar y cruzan un barranco para alcanzar el mirador de los Escurriales, bajo la atenta mirada de la Luna.
Otra es la denominada En busca de Heidi. Es una ruta sencilla de tres horas, ideal para hacer en familia, a través de la zona recreativa de Chanajiga.
El nombre surge porque el propietario del Hotel Tigaiga propuso señalizar varias rutas de senderismo de la zona con una niña senderista, que la imaginación popular bautizó como Heidi.
La tercera programada para el día 10 es la circular de Chamorga a Roque Bermejo, un trayecto de casi 9 km para hacer en cinco horas, donde en la Punta de Anaga se explora la vegetación del bosque de laurisilva y el fayal-brezal, “que forman un manto verde que cubre las crestas”, indican en la organización; así como la vegetación de matorral xerófilo y el cardonal-tabaibal.
El pasado indígena de Tenerife
Estas jornadas concluyen el día 11 con dos propuestas. Una de la que abre las puertas de la Arqueología y Etnografía en la región, a través del descubrimiento de las huellas indígenas en torno al camino real entre San Miguel y la Aldea Blanca, como yacimientos rupestres y cuevas funerarias.
En el mirador de Centinela, por ejemplo, se encuentra la mayor concentración de yacimientos al sur de la isla.
Una de las rutas permite conocer los valiosos yacimientos arqueológicos de la cultura indígena de Tenerife
La ruta de 4,24 km dura unas cinco horas, y es de dificultad media.
La otra es la del Chavao, un recorrido sencillo de 3,82 km que comienza en el mirador de Chahorra, que permite divisar el Pico Viejo y Las Narices del Teide, y en un trazado con escaso desnivel llega al Roque del Cedro, donde se pueden ver las curiosas formaciones pétreas de las lavas almohadillas cordadas.
Juan Pedro Chuet-Missé es redactor de Cerodosbé/Tendencias desde 2017, y del Grupo Economía Digital desde 2015. Especialista en destinos fuera de lo común, cultura, estilo de vida, viajes y todas aquellas historias que vale la pena contar.
