La Galería de los Uffizi reabre uno de sus espacios secretos

Era el espacio donde Fernando I presumía del poder de los Médici. Una sala con mapas en la pared que simbolizaban la influencia de estos nobles de Florencia sobre Toscana y buena parte de Italia.

Se trata de la Terraza de los Mapas de la Galería de los Uffizi de Florencia, un espacio que estuvo cerrada al público durante 20 años y que hoy reabre tras dos años de una compleja restauración y que implicó una inversión de 700.000 euros.

Grandes mapas para mostrar la gloria de los Médici

Las vistas sobre la ciudad son espectaculares. Pero también son fascinantes los gigantescos mapas murales creados en el siglo XVI, cada uno ocupando una pared entera, donde 1.200 pueblos y ciudades están representados con el detalle de los nombres inscriptos en oro, precisó el director del museo Eike Schmidt en un comunicado.

En los mapas se ve la influencia de los Médici sobre la región de Toscana, con 1.200 pueblos y ciudades registrados con letras de oro

Cómo será de majestuosa la sala que el director de cine Dario Argento la usó para filmar una escena de El arte de matar (originalmente se llamaba La síndrome di Stendhal) de 1996, donde el protagonista se desvanece ante la belleza del lugar.

Visitas con acceso limitado

Durante dos décadas el espacio, ubicado en las plantas superiores del museo de arte más importante de Florencia (con perdón de la Academia), estuvo cerrado; excepto por una breve exposición que se realizó en 2014.

Tras la reapertura de la Terraza de los Mapas solo 20 personas podrán estar en el lugar al mismo tiempo

Sin embargo las visitas estarán restringidas: solo 20 personas podrán estar simultáneamente en el espacio, y un semáforo regulará el tiempo que podrán estar en ella.

El espacio favorito de Fernando de Médici

Originalmente la terraza era un espacio abierto, diseñada por Giorgio Vasari pero que fue cerrado en 1690 por órdenes de Fernando de Médici.

En ese entonces, cuando regresó de Roma dejó los hábitos de cardenal y se convirtió en Gran Duque de Toscana, tras la victoria de Florencia sobre Siena.

Para celebrar esta conquista ordenó al cartógrafo Stefano Bonsignori que dibujara los mapas del nuevo Gran Ducado, que luego el pintor Tommas Buti se encargó de darle color.

Este era el lugar favorito de Fernando I para demostrar la presencia de la Casa Médici en el centro de Italia. Para darle un toque más artístico ordenó trasladar a esta sala los frescos del Palazzo di Firenze, donde vivía en Roma, que fueron realizados por el pintor Jacobo Zucchi.

En la pared restante se encuentra un mapa pintado de la isla de Elba, que fue realizado en el siglo XIX porque el original se perdió tras una reconstrucción de la sala.