Ampere, la filial de Renault que quiere liderar el coche eléctrico europeo y que hará los nuevos Ford
Ford y Renault han cerrado un acuerdo para la fabricación de dos nuevos modelos de la marca norteamericana que se basarán en la plataforma Ampere
Renault 5 E-Tech Electric fabricados por Ampere
Ampere es la división de vehículos eléctricos y software de Renault, concebida para ser un pure player europeo en movilidad eléctrica. Nació como negocio autónomo dentro del grupo francés en el marco del plan estratégico Renaulution y se ha estructurado como una filial dedicada en exclusiva al diseño, ingeniería, fabricación y comercialización de turismos 100% eléctricos bajo la marca Renault en Europa.
Este martes se ha anunciado que Ford ha firmado un acuerdo con Renault para que en el norte de Francia se fabriquen dos nuevos modelos con la marca norteamericana que se basarán en la plataforma Ampere.
La compañía fue anunciada en noviembre de 2022 y completó su segregación del resto de actividades de Renault el 1 de noviembre de 2023, como parte de la tercera fase del plan de transformación del grupo. Desde entonces opera como una empresa autónoma, aunque sigue siendo una filial propiedad de Renault. El objetivo declarado es acelerar la transición del fabricante hacia una nueva generación de coche eléctrico y definido por software, con su propia organización, equipo directivo y cuentas separadas.
En un principio, Renault estudió sacar Ampere a bolsa para poner en valor el negocio y captar recursos adicionales, pero en enero de 2024 decidió cancelar la operación por las condiciones del mercado. El grupo ha confirmado que seguirá financiando el desarrollo de la filial hasta alcanzar el punto de equilibrio, sin alterar sus objetivos financieros.
A qué se dedica Ampere
Ampere se define como una compañía de vehículos eléctricos e “inteligentes” (iEV), en la que el software tiene un peso central. Su misión es diseñar y fabricar coches eléctricos “tecnológicos pero asequibles”, con especial énfasis en la experiencia de usuario (conectividad, servicios digitales) y en la reducción de la huella de carbono. Sus modelos se producen en Francia y se dirigen principalmente al mercado europeo.
Bajo el paraguas de Ampere se encuadran los principales lanzamientos eléctricos recientes de Renault, como el Mégane E-Tech 100% eléctrico, el Scenic E-Tech y el nuevo Renault 5 E-Tech, que se ha convertido en uno de los pilares de la ofensiva de la marca en el segmento de los urbanos eléctricos. El grupo ha explicado que el modelo más económico del Renault 5, con un precio por debajo de 25.000 euros, llegará al mercado en el segundo trimestre, y ha adelantado también un futuro Twingo eléctrico y el primer “software-defined vehicle” (SDV) europeo a partir de 2026.
Este objetivo, vehículos por menos de 25.000 euros, es el mismo que se ha marcado Volkswagen con el Polo y el Cupra Raval, cuyas baterías saldrán de la gigafactoría de PowerCo en Sagunto.
Además del diseño y la fabricación de vehículos, Ampere concentra el desarrollo de software embarcado, sistemas de conectividad, funciones avanzadas de asistencia a la conducción y servicios digitales asociados al automóvil. La compañía se ha marcado como objetivo reducir los costes de sus vehículos eléctricos en un 40% de aquí a 2028 y alcanzar la rentabilidad a finales de 2025, apoyada en una base industrial de alta productividad y en plataformas eléctricas específicas.
Dónde tiene sus plantas: el hub Ampere ElectriCity
El núcleo industrial de Ampere se concentra en Francia. Cuando se completó la segregación de la filial, Renault transfirió a la nueva compañía la operativa de once centros en territorio francés, entre ellos cuatro plantas industriales clave: el cluster Ampere ElectriCity en el norte del país -que agrupa las factorías de Douai, Maubeuge y Ruitz- y la planta de Cléon, especializada en cadenas cinemáticas eléctricas.
Ampere ElectriCity, creado en 2021, se presenta como un ecosistema industrial “único en Francia” para la producción de vehículos eléctricos. Los tres centros de Douai, Maubeuge y Ruitz cuentan con más de medio siglo de presencia industrial en la región de Hauts-de-France y han sido reconvertidos para abastecer la nueva generación de modelos eléctricos. La planta de Cléon suministra motores y componentes de propulsión a estos centros.
En Douai, uno de los iconos industriales de Renault, Ampere ha concentrado la producción de sus nuevos turismos eléctricos sobre plataformas dedicadas. Esta planta forma parte del hub ElectriCity y recientemente ha alcanzado el hito de 100.000 unidades del Renault 5 E-Tech ensambladas en apenas 15 meses, con unos 900 vehículos saliendo de la línea de montaje cada día, dos tercios de ellos correspondientes al nuevo urbano eléctrico.
La planta de Ruitz, también integrada en ElectriCity, se ha especializado en componentes de alto valor añadido para el coche eléctrico. Gracias a una ‘joint venture’ con el grupo chino Minth, el centro opera líneas de ensamblaje de carcasas de batería de alta tecnología para los vehículos de Ampere, dentro de una cadena de valor que busca combinar eficiencia industrial y tecnología avanzada.
Maubeuge completa el triángulo industrial del norte de Francia como tercera pata del hub ElectriCity, mientras que Cléon, más al oeste, aporta los motores y sistemas de propulsión eléctricos. En conjunto, estas cuatro plantas constituyen el polo de fabricación de Ampere, con una capacidad inicial de unos 400.000 vehículos al año, ampliable hasta alrededor de 620.000 unidades, según ha detallado el grupo.
A esta base se añaden centros de ingeniería, oficinas y laboratorios en la región de París y otras zonas de Francia. Entre ellos destaca un nuevo laboratorio de baterías cerca de la capital francesa, que Ampere ha inaugurado recientemente como parte de su esfuerzo por ganar autonomía tecnológica y reducir costes en el corazón del vehículo eléctrico.
Acuerdo de Ford y Renault
Precisamente este martes se ha anunciado que Ford ha firmado un acuerdo con Renault para que en el norte de Francia se fabriquen dos nuevos modelos con la marca norteamericana. De este modo, se utilizará la plataforma eléctrica de Renault y Ford acelerará los plazos para cubrir el agujero que tenía en su portfolio de vehículos al carecer de un sustituto del Fiesta.
Un pilar de esta colaboración es un acuerdo de asociación para el desarrollo de dos vehículos eléctricos diferentes con la marca Ford. Los nuevos modelos se basarán en la plataforma Ampere, aprovechando los sólidos activos de vehículos eléctricos y la competitividad de Renault Group, y serán producidos por Renault Group en el norte de Francia, lo que ilustra las capacidades de fabricación de última generación de ElectriCity de Ampere.