Juan Roig (Mercadona) se vuelca con la comida preparada: «Nuestras tatarabuelas no hubieran cocinado con la tecnología de hoy»
El presidente de Mercadona reivindica que el 90% de sus trabajadores cobra 2.100 euros al mes y hace autocrítica: "Tenemos muchos productos que no son de calidad 10"

El presidente de Mercadona, Juan Roig, interviene en el Congreso de Aecoc.
El presidente de Mercadona, Juan Roig, ha marcado como uno de los objetivos prioritarios del gigante de la distribución en España crecer en su sección de ‘Listo para comer’, de comida ya cocinada. «Ahora hay muchísima más tecnología para que ‘El Jefe’ -como en Mercadona denominan al cliente- no se cocine en su casa. Si nuestras tatarabuelas hubieran tenido la tecnología que hoy tenemos, tampoco hubieran cocinado», ha explicado.
Además de continuar con su modelo de ‘Calidad Total’ y de relación con sus 2.000 proveedores, otro de los grandes hitos a los que mira Juan Roig es hacia continuar con la expansión de Mercadona en Portugal. «A los portugueses no los tratamos como se merecen, España no ha mirado a Portugal de igual a igual», ha lamentado el empresario valenciano.
Así lo ha expuesto durante el Congreso de la Asociación de Fabricantes y Distribuidores (Aecoc) celebrado en Valencia, en el Roig Arena, donde Roig ha reivindicado la fortaleza de esta asociación: «No hay ninguna asociación de fabricantes y distribuidores mejor en el mundo que esta. Fuera nos pegamos, pero aquí hemos generado muchas sinergias».
Además, ha recordado algunos de los acuerdos a los que han llegado los grandes del sector que forman Aecoc, como la propia Mercadona, El Corte Inglés, Carrefour o Dia, entre otras, entre los que ha destacado «hitos» como el palet de 80×120, -«hemos unificado cuando al principio nos peleábamos»-, el código de barras y su evolución o el EDI (Intercambio Electrónico de Datos). Además, ha reivindicado que la asociación es sostenible económicamente, tiene «60 millones en el banco» y sin subvenciones.
«Este es mi símbolo, el boli BIC»
A continuación, Juan Roig ha puesto sobre la mesa algunos ejemplos de productos que han cubierto necesidades de los necesidades como ejemplo de lo que trata de hacer Mercadona. En primer lugar, se ha referido al bolígrafo: «Sirve para escribir. Este es mi símbolo, el boli BIC (ha dicho mientras se lo sacaba del bolsillo de la americana). También hay otros que sirven para demostrar que son ricos». Otro caso es el del creador del Chupa Chups, que «vio una necesidad que nadie había visto y es un invento 100% español».
También se ha referido a la «misión de la empresa». «Cuando yo estudiaba decían que era maximizar beneficios, yo creo que una empresa tiene que satisfacer al trabajador, capital, cliente, proveedor y a la sociedad. Nosotros tenemos nuestra peculiaridad. Hay veces que nos pegamos tortazos porque vamos contracorriente, pero otras acertamos. La misión de Mercadona como empresa es primero el cliente, ‘El Jefe’, segundo el trabajador, tercero el proveedor, cuarto la sociedad y quinto el capital», ha recordado.
La ‘misión’ de Mercadona y el sueldo más común
Asimismo, el presidente de Mercadona se ha referido a la importancia que para la compañía tiene ‘El Jefe’: «Es el que tiene el poder sobre la vida o la muerte de una empresa. Es nuestro faro. El jefe quiere que le llenemos la tripa, esa es la misión de Mercadona. Además, quiere seguridad alimentaria, calidad, servicio, surtido y precio. Nosotros no queremos que el cliente elija el producto que coger, sino que acierte. Esto se hace con una gran calidad y con un surtido muy eficaz. No se trata de tener todos los productos que hay en el mercado. Para conseguirlo necesitamos interproveedores y tienen que ser de confianza».
A continuación se ha referido al trabajador de Mercadona: «Tenemos que cuidarlo muy bien. Tiene que estar satisfecho y comprometido con la empresa. Le damos valor a cambio de compromiso. Las manos las puedes comprar con dinero, pero el corazón y el cerebro se consigue teniéndolos satisfechos». En este punto ha señalado que un gerente A, que «es el 90% de la empresa», cobra 2.100 euros netos al mes.
«Encontrarse un pelo en un pollo no es aceptable»
«Siempre se habla de guerras en el sector, pero para nosotros la guerra está en la calidad», ha continuado Roig, que ha comentado que «hay quien dice que un 0,5% de error es aceptable». «Puede encontrarse alguien un pelo en un pollo, es posible, pero a quien le toca no le hace gracia, y nosotros queremos que el error sea cero«, ha añadido.
Seguidamente, Roig ha reconocido que «en Mercadona tenemos muchos productos que no son de calidad 10«. Sin embargo, ha puesto en valor lo «orgulloso» que está de sus 2.000 proveedores: «Todos ganan dinero. Si no ganas dinero, no le vendas a Mercadona».
En este sentido, se ha referido a otros de los puntos clave del modelo de Mercadona, el capital. Ha afirmado que «los accionistas están muy satisfechos» y ha reivindicado «ganar dinero»: «Es bueno, necesario, obligatorio y satisfactorio». En relación a esto, ha apuntado que «pagar impuestos es una cosa muy buena y muy sana», aunque «otra cosa es cómo se gestione».
Ayudas directas de 108 millones a afectados por la DANA
Juan Roig también se ha referido a la DANA que azotó gran parte de la provincia de Valencia ahora hace un año, el 29 de octubre de 2024, sobre lo que ha reiterado que «un millón de españoles nos sentimos desamparados». «Fue una cosa de la naturaleza. Fue una desgracia muy muy grande. Murieron 229 personas, entre ellos cuatro amigos míos. No se supo decir o no sé cuántos, pero lo peor es que luego nos sentimos desamparados», ha señalado, mientras que por el contrario, para él, los voluntarios fueron «fuente de inspiración, gente normal y corriente que sin ninguna orden se vino a hacer lo que pudo».
Asimismo, ha reivindicado que tanto él como su mujer, sus hijas y sus yernos se pusieron en marcha para ayudar a los afectados por la DANA: «Nosotros pusimos en marcha el movimiento Alcem-se y ayudamos y a muchísimos empresarios les dimos un vaso de agua en el desierto. A muchos empresarios les dimos 8.000 euros netos y la única condición es que tenían que reabrir el negocio». Las ayudas del plan sumaron, en total, 108 millones de euros a fondo perdido.